Lograr entrelazar de manera transversal temas como valores, transparencia y educación es un reto, pero conseguirlo con pertinencia como lo hizo el Doctor Román Sánchez Zamora en su segundo libro titulado “Mejores prácticas de transparencia, anhelos de nuestra juventud”, es un gran logro, cabe señalar que atrás de dicha publicación hay un esfuerzo conjunto entre instituciones, padres de familia, escuela y estudiantes, quienes fueron parte importante “para lograr consolidar este producto, que primero buscó que jóvenes generaran cuentos con el ánimo de aportar nuevas perspectivas para hacer estudios participativos donde posteriormente se pretende implementar políticas preventivas contra la corrupción” Zamora (2016).

Vale la pena mencionar que el autor del libro Román Sánchez Zamora es:  Profesor Investigador del Instituto de Ciencias de Gobierno y Desarrollo Estratégico de la BUAP,  Miembro del Sistema Nacional de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, Miembro del Padrón de Investigadores de la BUAP, Doctor de Administración Pública por el Instituto de Administración Pública del Estado de Puebla y especialista en temas de  investigación  como: Rendición de Cuentas, Transparencia, Participación Ciudadana.

Como siempre lo he expresado en esta columna, uno de mis mayores intereses ha sido el de poder incidir en una transformación social basada en lo positivo, echando mano de todo lo necesario para poder aportar a esta sociedad que a pesar de parecer estar perdida, creo fielmente que todavía tiene remedio, pero cuando me topo con este tipo de publicaciones cuya naturaleza es loable, y sobre todo basada en un trabajo científico, se convierte en oro molido,  ya que  ofrece propuestas de solución, en este caso particular dirigido al binomio corrupción-transparencia; por dicha razón recomiendo al cien por ciento su lectura de este trabajo, pero además su uso como una herramienta didáctica, sobre todo cuando tiene el tino de promover un cambio por la vía de la educación, que sin duda alguna, es lo que me parece más atinado de todo.

La realidad siempre superará la ficción, y lo que logré leer en muchas de las páginas de este libro,  -el cual en gran parte es una recopilación de cuentos donde se aborda desde las diferentes ópticas el tema de la corrupción-, me deja helada, las narraciones son relatos basados en vivencias actuales de jóvenes, que  reflejan a una sociedad profundamente dañada, herida, ensuciada, donde la lección primordial es que urge primero, hacer un alto, y analizar los valores que estamos transmitiendo a las nuevas generaciones, quienes se están nutriendo sin duda alguna en gran medida de antivalores, que básicamente experimentan y viven en sus entornos inmediatos. Por dicha razón esta publicación es un excelente instrumento, porque busca aplicar estrategias que contrarresten la cultura de la corrupción que se está generando y que lamentablemente está permeando y concibiéndose como algo “normal”, y que lamentablemente se vive a diario, se respira, pero que sin duda alguna urge cambiar, abolir, transformar. Por ende, este libro puede ser una opción, la cual se puede trabajar en la escuela.

Como lo dice textualmente la contraportada de esta publicación titulada “Mejores prácticas de transparencia, anhelos de nuestra juventud” obra de Román Sánchez Zamora, “Este libro representa una oportunidad para meditar desde varios vértices el problema de la corrupción y el fenómeno de la transparencia, porque nos permite conocer de primera mano, el sentir de nuestros jóvenes de nivel secundaria, que a través de sus relatos en forma de cuento, manifiestan sus pensamientos más profundos sobre el valor de la honestidad, la familia y la formación académica.   Esta no es una obra que privilegia lo literario, sino el sentir, la preocupación por el futuro, la violencia en las escuelas, las necesidades de las personas; además reconocen el cómo algunas autoridades realizan actos de corrupción, donde los jóvenes comprenden bien que estas actitudes las cuales son el reflejo de lo que sucede en su entorno doméstico, por lo cual, el libro después de cada cuento se agregan una serie de ejercicios sociales que le ayuda a los jóvenes reflexionar sobre su formación política, cívica y su corresponsabilidad social.”

Lo interesante de este libro es la promoción de la intervención  de la sociedad, donde por una parte  las aportaciones las hacen los estudiantes con la realidad que comparten por medio de sus cuentos, además como se menciona en la introducción de este libro, la importancia de la “Participación ciudadana, la visión del valor de la participación cívica vista desde los jóvenes y establecer una serie de lecciones sociales donde ellos son la parte principal de la solución”. Además como en este mismo apartado se menciona “Estudiar y proponer las filosofías de las buenas prácticas no debe presentarse como una serie de teorías  lejanas a las realidades sociales, las necesidades y anhelos de la población, del cómo, quién y para qué se están formando jóvenes con valores cívicos”.

Algo que considero importante resaltar del trabajo hecho por el doctor Román Sánchez Zamora y que predomina en sus dos publicaciones hechas, es ese interés de retomar los valores humanos por medio de la educación como la base de la transformación social, además de ese original enfoque que le da al uso del cuento como una herramienta didáctica que promueve el cambio basando en contenidos que contrarresten la cultura de antivalores, aspectos tan necesarios y urgentes de retomar en la escuela y la familia. En lo personal yo calificaría el trabajo de Sánchez Zamora en un enfoque científico permeado de la humano y lo sensible, realmente deseo que este tipo de esfuerzos se multipliquen en la comunidad  científica y académica, ya que brindan aportes que pueden abonar mucho en la mejora social.

Cualquier comentario me lo puedes hacer llegar a mi correo vicky_barbara@hotmail.com o a la página de Facebook de esta columna Eva y Lilith. ¡Hasta la próxima!