Tras una nota difunda en el periódico El Universal donde se asegura que la compañía que le compró al líder panista Ricardo Anaya una nave industrial tiene como dirección un lote abandonado en Querétaro, éste publicó una carta señalando “precisiones” ante lo que el califica como una “nota inexacta”.

En el documento aseguró que no conoce de ninguna irregularidad en la adquisición del predio y que a quien le corresponde verificar la información es a las autoridades competentes y no a quienes únicamente «le vendimos un inmueble cuyo precio fue cubierto a su entera satisfacción«.