El pasado 18 de noviembre, durante la tradicional apertura de puertas en el muro entre San Diego, Estados Unidos, y Tijuana, México, se llevó a cabo una boda imprevista entre la mexicana Evelia Reyes y el estadounidense Brian Houston.

La ceremonia duró un par de minutos y contó con la aprobación de las autoridades presentes, sin embargo, está en riesgo de ser eliminado tras descubrirse que el esposo es un narcotraficante.

De acuerdo con medios, el hombre que contrajo matrimonio durante el evento “Puerta de esperanza” fue detenido en febrero en el cruce de San Ysidro en posesión de 19 kilogramos de heroína, 21 de metanfetamina y 19.5 kilos de cocaína.

Pagó una fianza y salió en libertad condicional, con la prohibición de abandonar el país, meses después se declaró culpable y en febrero tiene prevista una audiencia de lectura de sentencia.

Durante la boda, Houston no reveló a la prensa por qué no podía viajar a México para verse con su ahora esposa, únicamente explicó que mantuvo la relación a través de videollamadas y mensajes de texto.

Por su parte, la Patrulla Fronteriza asegura que Houston aprobó una revisión interna, pero que “este evento ha puesto en peligro futuros eventos y la continuidad de la apertura de la puerta del muro fronterizo”.