Enclavado en el número 23 de la calle 5 de Mayo, en el Centro Histórico capitalino, abrió el Museo Art Toys, un recinto de culto al cómic que busca reivindicar el arte que hay en la elaboración de juguetes de colección como los más de 400 que tiene en su acervo.

Hugo Andrade, curador del recinto, explicó a Notimex que el espacio de corte familiar nace de la necesidad de compartir con toda la gente este mundo de fantasía a través de juguetes (piezas extrañas, réplicas exactas y modelos de lujo) que detrás de sí tienen todo un proceso artístico y van más allá de los mundos a los que pertenecen.

Ahorita, expuso, el público puede ver una serie de personajes de Star Wars Marvel, DC, así como de icónicas películas como «Terminator» o «Volver al futuro«, en busca de que pueda convertirse en «una punta de lanza que permita al público ver el arte en los juguetes».

Recordó que en la elaboración de las piezas, muchas de ellas elaboradas de manera artesanal, hay una gran mezcla de diseño, escultura, pintura y hasta ingeniería; también, una mezcla de materiales, textiles, colores, etcétera.

La idea es que la gente empiece a ver los juguetes como obras de arte, insistió Andrade, quien refirió que se tienen más de 400 piezas en exhibición que estarán rotando para que el público pueda visitarlos en más de una ocasión.

Detalló que la gran mayoría se trata de esculturas originales, hechas a mano, y que además de personajes de fantasía han incluido íconos de la época moderna, desde el científico Albert Einstein, hasta el revolucionario Che Guevara, pasando por idolos del deporte como Michael Jordan, del cine como Bruce Lee, o de la música como Michael Jackson.

Una parte muy importante de la exhibición es que todos estos personajes, los héroes que tenemos aquí, evocan la nostalgia o valores que queremos ver en una sociedad con gran necesidad de que alguien nos represente en nuestros ideales.

«Batman, Spiderman, etc, son muy valorados por lo que conlleva, la gente viene con su familia, y comparten, y se hace una dinámica muy padre, porque los padres les cuentan a los hijos sobre sus superhéroes y viceversa».

Sobre el valor de la colección, Andrade destaca que por el momento no se le ha querido dar un enfoque de cuánto cuesta, porque para ellos lo más valioso es toda la ingeniería que llevan las puezas, que muchas de ellas son piezas únicas y que tienen más un valor artístico que un precio.

Y es que, comentó, cada pieza tiene su historia, «desde que la ves que va a salir te emociona, algunas veces si tienes la fortuna de estar viajando te la traes o si te la regala alguien que quieres tiene otro valor».

Ello hace que tampoco tengan ua pieza favorita o consentida, pues todas tienen un valor sentimental diferente para el entusiasta grupo de coleccionistas que presta sus piezas para que sean exhibidas en este museo que tiene unas semanas operando y que piensa consolidarse añadiendo valor agregado a las visitas del público.

Por ejemplo, expuso, tienen pensado rifar una pieza de colección entre la gente que visite el museo antes del 13 de enero. La idea es que con el boleto de entrada la gente pueda participar en una tómbola para ganar una réplica de robocop.

La gente puede venir a conocer todas las piezas que tenemos, aprovechar para tomarse fotos con los personajes, participar en trivias y pasar un momento muy divertido en el museo, que pretende ser permanente y con exhibiciones temáticas, que de paso a juguetes de diseñador en diversas líneas, como «Los amos del universo«, «Los caballeros del zodiaco«, etcétera.

También están pensando desarrollar cuestionarios para que chicos y grandes participen de algunas trivias que los hagan ganar algunas sorpresas, porque la apuesta es hacerlo más dinámico e interactivo y que no sólo sea un lugar al que llegas a mirar a todos lados. Nosotros los invitamos a apreciar los detalles, aseguró.