La explosión de una ambulancia-bomba en Kabul,  cerca del antiguo Ministerio del Interior y cerca de unas instalaciones del Directorio Nacional de Seguridad (NDS), la principal agencia de inteligencia afgana, deja hasta el momento 40 muertos y más de 100 heridos.

El portavoz del Ministerio de Salud Ismail Kawosi ha indicado que los heridos han sido trasladados a hospitales de la zona, aunque se teme que el número de víctimas mortales siga aumentando.

El grupo terrorista talibán han reivindicado el atentado en un mensaje en Telegram en el que afirman «un mártir mediante con coche bomba alcanzó el primer punto de control cerca del Ministerio del Interior».

En el momento de la explosión había una gran concentración de policías en la zona de acuerdo al portavoz del grupo Zabihullah Mujahid.

El atentado se produjo en medio de una espiral ascendente de ataques terroristas contra objetivos civiles por parte de talibanes y del Estado Islámico (EI) en los últimos días.

El saldo de los atentados recientes es de 40 personas muertas en el Hotel Intercontinental de Kabul durante un asalto perpetrado por seis atacantes.

El ataque del Estado Islámico contra la sede de Save the Children en Jalalabad acabó con la muerte de cuatro empleados de la organización no gubernamental, un transeúnte y un miembro de las fuerzas de seguridad, así como de los cinco terroristas.