El tenista Roger Federer recibió por quinta ocasión el Premio Laureus al Mejor Deportista del Año, además es actualmente el número uno del ranking de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP).

En el Salón de las Estrellas del Sporting Mote-Carlo, fue donde el suizo fue conmemorado; dentro de los que esperaban recibir este galardón se encontraban Lewis Hamilton, piloto de Fórmula Uno, el ciclista Chris Froome y el atleta Mo Farah.

«Quiero que mis primera palabras sean para Rafa Nadal, él podría estar aquí porque es un jugador increíble; hemos librado grandes batallas y siento que me ha hecho mejor jugador. El también merecería este premio, es un jugador increíble, un amigo y quiero compartir este premio con él», aseguró.

 

 

Además Federer recibió también el premio a la Mejor Reaparición, pues confesó haber estado fuera de las canchas cerca de seis meses.

«Después de Wimbledon pensé que tendría que estar bien en dos meses, cuando me dijeron que serían al menos cuatro me quedé en shock, soy una persona positiva, a la que le gusta ver siempre el vaso medio lleno, pero es difícil en esas circunstancias. Hablé mucho con mi familia y mi equipo, pensé en la parte buena, en la oportunidad de pasar tiempo en casa, hacer planes con los amigos. Eso me vino muy bien. Al regresar era otra persona porque esos meses fuera me liberaron de alguna manera», explicó.

El tenista suizo aseguró que mientras tenga la capacidad para ganar seguirá en la pelea para seguir acumulando victorias, pues se encuentra a tres triunfos para alcanzar 100 títulos profesionales, lo cual no se propuso pero dijo que sería bonito conseguir.

«Nunca pensé que podría llegar a tantos. Recuerdo que tras ganar mi primer torneo en Milán en 2001 pensé: ‘Siempre podré decir a mis hijos que gané un torneo’. Era una sensación increíble. Es surrealista estar en esta situación. Lo intentaré, pero dependerá de mi salud también» puntualizó.