Unos 40 migrantes fueron rescatados el martes en aguas entre el sur de Inglaterra y el norte de Francia, en un periodo que ha registrado un mayor número de cruces por el Canal de la Mancha de personas que desean llegar a costas británicas, informaron autoridades de ambos países.
La autoridad marítima regional francesa informó en un comunicado que detectaron una pequeña embarcación de goma con el motor descompuesto en las costas de Calais. Un helicóptero policial que vigilaba la zona ayudó a un buque de rescate a llegar hasta los migrantes.
Los ocho migrantes, incluyendo dos niños, que trataban de llegar a Gran Bretaña por el Canal de la Mancha fueron rescatados y entregados a las autoridades británicas. Por el momento se desconoce la nacionalidad de los pasajeros.
Desde hace mucho tiempo, Calais ha sido un punto de ingreso para migrantes que huyen del conflicto o la pobreza en África y Oriente Medio. Hace dos años, las autoridades francesas cerraron un campamento improvisado que llegó a albergar hasta a 10.000 personas que esperaban subirse a camiones que cruzaban por el Canal de la Mancha por ferry o en trenes que van de Francia hacia Inglaterra por un túnel.
Por otra parte, las autoridades británicas informaron que agentes fronterizos respondieron a cinco incidentes en aguas inglesas desde la primera hora del martes y que involucraban a unos 40 pasajeros que se dijeron provenientes de Irak, Irán y Afganistán.
La Oficina del Interior dijo a la Press Association que todos fueron examinados por médicos y los enviaron a entrevistas de migración. Agencias de bienestar se harán cargo de los dos menores, reportó la agencia de noticias británica.
Entretanto, en Grecia la policía arrestó a un hombre de 34 años y a una mujer de 27, ambos de Rumania, acusados de tráfico de seres humanos.
La policía en Salónica dijo que las detenciones se efectuaron cuando los dos sospechosos salían de un almacén donde estaban retenidos unos 44 migrantes que cruzaron desde Turquía. Según la autoridad, los migrantes pagaron unos 1.700 euros (1.940 dólares) cada uno para que los rumanos los recogieran en un vehículo en Grecia.
En otro caso no relacionado, la policía de Salónica arrestó el lunes a tres paquistaníes sospechosos de retener a dos ciudadanos de Bangladesh en un apartamento. Los sospechosos exigían dinero a los familiares y amenazaban con usar violencia si no se les pagaba.
