El Congreso de Nuevo León aprobó en lo general el dictamen con el que criminaliza el aborto, anteriormente solo se podía interrumpir el embarazo en caso de que la vida de la madre corriera peligro o como causa de una violación.

Con 30 votos a favor, ocho en contra y dos abstenciones, el Congreso hizo que las mujeres sean detenidas en caso de que su embarazo sea interrumpido, por lo que la Comisión de Derechos Humanos estatal pidió al Congreso dar marcha atrás al dictamen porque es un retroceso en las garantías individuales de las mujeres.

Ya que su aprobación significaría la limitación del principio de autonomía de las personas, así como de los derechos reproductivos y sexuales de las personas.

Esta iniciativa fue presentada desde 2014 por el legislador panista Francisco Treviño, pero todo este tiempo se mantuvo en la “congeladora”, pero ahora con esta aprobación se protege la vida desde la concepción, aseguraron los legisladores.

«El Estado reconoce, protege y tutela el derecho a la vida que todo ser humano tiene desde el momento de la concepción entra bajo la protección de la ley y se le reputa como nacido para todos los efectos legales correspondientes hasta su muerte natural sin perjuicio de las excluyentes de responsabilidad previstas en el Código Penal para el estado de Nuevo León«, se lee en el dictamen; de acuerdo con medios locales.