Lo primero que sintió Lionel Messi fue un golpe en la espalda, propinado por Chris Smalling con el hombro. Luego, el mismo zaguero del Manchester United estiró el brazo derecho, que impactó el rostro del astro argentino.

De inmediato, Messi se desplomó y se llevó la mano al rostro. Una hemorragia nasal causó alarma en el Barcelona.

El primer triunfo del Barça en Old Trafford costó literalmente sangre. Dominado por el equipo visitante, el Man U recurrió a la rudeza después de los primeros 30 minutos.

El Barcelona finalmente se impuso, aunque el margen que sacó en el feudo de los Red Devils fue exiguo.

Luke Shaw inadvertidamente acabó empujando el cabezazo de Luis Suárez a la red, dándole al club catalán la victoria 1-0 ante el United el miércoles en el partido de ida de su eliminatoria de cuartos de final de la Liga de Campeones.

“Nos deja buen sabor de boca, aunque sabemos que es un resultado corto. Hay un segundo partido, y sabemos cómo se las gasta el United fuera de casa… Ha sido un partido duro e intenso, con momentos en los que hemos tenido que sufrir, pero estamos contentos”, manifestó el técnico barcelonista Ernesto Valverde.

El gol — anulado inicialmente por posición adelantada antes de que fuera ratificado mediante el videoarbitraje — se produjo a los 12 minutos durante un tramo de grosero dominio del Barcelona, encarnado en una posesión que superó el 80%.

“Ha sido un gran cabezazo de Luis”, consideró Valverde. “El valor de lo que hace no depende de que en algún momento un jugador toque el balón o no”.

Pero el Barcelona no pudo sostener el ritmo alucinante, diluyéndose en la desprolijidad con el paso de los minutos. El golpeo ejercido por el Man U sobre los jugadores visitantes fue reduciéndoles intensidad, pero el equipo inglés jamás pareció cerca del empate.

Si bien los campeones de España pusieron fin a una seguidilla de seis partidos sin ganar como visitante en eliminatorias europeas, racha que se remontaba a 2016, este cruce de cuartos de final no quedó resuelto. El United buscará revertir el marcador en contra al visitar al Barça el martes próximo.

Rudimentario en el argumento futbolístico, el United solo pudo manifestar garra ante los visitantes, a ratos excediéndose en el juego ríspido. La mejor evidencia fue cuando el brazo derecho del zaguero Chris Smalling golpeó el rostro de Lionel Messi.

Smalling se salvó de ser amonestado, mientras que el astro argentino acabó sangrante y tuvo que salir de la cancha para recibir asistencia.

“La jugada ha sido un encontronazo. Smalling ha arrollado a Leo y veremos cómo está”, dijo Valverde. “Tiene un buen golpe y mañana lo examinarán los médicos, pero se ha llevado un buen golpe, seguro”.

Lo más cerca que el cinco veces Balón de Oro estuvo cerca de gritar su primer gol en Old Trafford fue a los 83 minutos cuando un remate suyo de tiro libre perdió fuerza al ser impactado en el paso por la barrera y el arquero David de Gea amansó el balón.

El portero español del United fue clave al repeler otras acciones de peligro de los visitantes, incluyendo una en el primer tiempo al estirar la pierna izquierda para repeler el disparo de Philippe Coutinho.

De Gea también apareció para negarle el gol a Jordi Alba en la segunda parte.

El United tuvo que remontar para acceder a esta instancia, al perder 2-0 ante el Paris Saint-Germain en los octavos de final y luego imponerse 3-1 en la capital francesa el mes pasado.

“Después de lo visto con el PSG, no hay que confiarse para nada”, advirtió el central azulgrana Gerard Piqué, ex del United. “El PSG venía con un resultado mejor y era muy, muy favorito… y mira lo que pasó. Hay que salir con mucha concentración y seguro que la afición nos ayudará a clasificarnos”.

En la ida ante el PSG, el United apenas pudo ensayar un remate a puerta. Ante el Barcelona, el conjunto inglés ni siquiera pudo conseguir un disparo a puerta — la primera vez que eso les ocurre en la Liga de Campeones de 2005.

“La actuación de visita ante el PSG nos da esperanza. Creemos que podemos lograrlo”, manifestó el técnico del United, Ole Gunnar Solskjaer, cuyo equipo sufrió su cuarta derrota en cinco partidos dentro de las distintas competiciones. “Pero sabemos que jugamos probablemente contra los favoritos de este torneo”.

En el otro encuentro de la jornada, Ajax se vio en desventaja como local con un tanto de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, rescató un empate 1-1 ante la Juventus