Este lunes, las cuadrillas de rescate de Turquía sacaron de las ruinas los restos de las últimas dos personas que seguían desaparecidas tras el reciente sismo, con lo que la cifra de víctimas ascendió a 41.

El movimiento de magnitud 6,8 estremeció el este de Turquía el viernes, dejando también más de mil 600 heridos, según las autoridades. Por lo menos 45 sobrevivientes fueron sacados de entre los escombros.

Los rescatistas usaron taladros para perforar los escombros en Elazig, una ciudad al este del país, a fin de llegar a una mujer de 75 años y a otra persona, dijeron los familiares que aguardaban ansiosos en las cercanías.

El ministro del Interior Suleyman Soylu y el director de la agencia de desastres, Mehmet Gulluoglu, anunciaron el lunes que las personas rescatadas estaban sin vida.

Durante la noche fue extraído el cadáver de una tercera persona que estaba desaparecida, en ese mismo edificio.

La televisión mostró imágenes de veintenas de rescatistas alrededor del sitio derrumbado, rezando por las víctimas, antes de que fue declarada concluida la tarea de hallar sobrevivientes.

El sismo arrasó 76 edificios y dañó más de mil, por lo cual los habitantes de la zona tuvieron que alojarse en carpas, mezquitas, escuelas, estadios deportivos y residencias estudiantiles.

Las autoridades hicieron un llamado a la población de abstenerse de regresar a toda estructura que no esté totalmente firme.