La violencia y el caos en Sonora, reflejados en hechos como los del pasado fin de semana en la región de Caborca podría deberse a la posible reaparición del narcotraficante Rafael Caro Quintero, quien buscaría recuperar “sus plazas”.

Sonora ha vivido una espiral de violencia en los últimos meses, con actos delictivos de toda índole, sin contar los ataques en los que murieron 12 civiles en Caborca.

El posible regreso de Caro Quintero, uno de los narcotraficantes más temidos de la década de los ochentas, es advertido en narcomantas colocadas por sus partidarios.

Y en actos criminales.

La noche del viernes 19 de junio, un convoy de unas 15 camionetas irrumpió en la zona rural de Caborca; sus tripulantes, fuertemente armados, quemaron autos y asesinaron a una persona.; luego, el convoy ingresó en Caborca y atacó con granadas domicilios del centro; otra se dirigió a un domicilio, donde fue asesinado por error un trabajador universitario.

En otro hecho, dos cuerpos desmembrados fueron localizados junto con un mensaje amenazante en una carretera del municipio de Caborca, Sonora, la masacre se la adjudicó gente de Caro Quintero quien se autodenomina la Barredora 24/7 quien busca recuperar el territorio.

Luego de 28 años de prisión, Caro Quintero, salió del penal en Jalisco, tras obtener el auto de libertad en su favor.

De forma increíble, la justicia había ordenado la «libertad inmediata» del capo tras sobreseer una causa relacionada con la muerte, en 1985, del agente estadounidense Enrique Kiki Camarena.

La exoneración de Caro Quintero se debió a que ya cumplió las condenas que se le impusieron por tráfico de drogas y a que el caso en su contra por el secuestro y asesinato del agente de la agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), fue desechado por un fallo de jurisdicción.

Ya en libertad, es posible que Caro Quintero haya regresado al mundo del narcotráfico, ahora con la creación de un teórico Cártel de Caborca.