Este viernes, el gobierno federal firmó el “acuerdo para compra consolidada y eficiente de medicamentos y vacunas” junto a la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Mediante el acuerdo se busca una distribución “justa” y “oportuna” de medicina que beneficie a todos los sectores de la población, sobre todo a quienes han visto afectado su acceso a los servicios de salud.

El suministro de los medicamentos se realizará por medio de una empresa controlada por el estado, que iniciará sus operaciones en el mes de agosto.

En su conferencia diaria, el presidente Andrés López afirmó que el objetivo del acuerdo es poner una “solución de fondo” al “problema” de las medicinas, el cual se ha agravado, aseguró, por la “corrupción” de las empresas farmacéuticas, a las cuales acusó, sin pruebas, de proveer medicamentos “adulterados”.

Asimismo, garantizó que no faltarán los medicamentos en ningún punto del país, por más remoto que este sea.

La adquisición de los insumos médicos la coordinará la ONU para garantizar transparencia en el proceso.

Los medicamentos, vacunas y equipos serán comprados en licitaciones internacionales en las que podrán participar también empresas mexicanas.