Aunque una recuperación económica tras el relajamiento en las medidas de confinamiento por la pandemia de covid-19 es esperada, esta tomará más tiempo y será más gradual de lo previsto, según el Banco de México (Banxico), el cual calculó entre 2 y hasta 6 años como el plazo en el que el PIB volverá a sus niveles de 2018.

Según la la minuta de la última reunión de política monetaria, la Junta de Gobierno de Banxico estima que la actividad económica se mantendrá deprimida por largo tiempo y los daños se reflejarán particularmente en el mercado laboral.

Por ello, la recuperación dependerá de los avances en la contención de la epidemia, así como del desarrollo de una vacuna y de un tratamiento eficaz.

La junta prevé que el consumo y la inversión sigan con debilidad ante el bajo movimiento del mercado, los menores ingresos y la confianza mermada.

Esto se refleja, además, en un menor financiamiento para hogares y empresas y un disminuido dinamismo del consumo y la inversión.

Por último, los miembros de la junta consideraron evidente que, conforme evoluciona la pandemia y se desarrolla una lenta recuperación, la actual crisis dejará secuelas más allá de las generadas por el choque de oferta inicial.