El cara a cara entre el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y la candidata demócrata a la Vicepresidencia, Kamala Harris, comenzó en la noche de este miércoles en Salt Lake City (Utah) marcado por la COVID-19 del mandatario Donald Trump.

La de este miércoles es la primera y única ocasión que Pence y Harris se verán las caras durante la campaña electoral, ya que a diferencia de los debates entre Trump y su rival demócrata, Joe Biden, que tienen programados tres debates, los candidatos a la Vicepresidencia solo tienen uno.

El debate tiene lugar en un auditorio de la Universidad de Utah, consta de nueve segmentos de diez minutos cada uno y está moderado por Susan Page, periodista del periódico USA Today.

Como medidas extraordinarias de seguridad frente a la COVID-19 debido al reciente positivo de Trump, Pence y Harris están sentados a una distancia de 3,7 metros, no se dieron la mano al inicio del debate y hay varias barreras de plexiglás entre ambos, y entre ellos y la moderadora.

Tanto Harris como Pence llegaron a Utah con días de antelación al debate (la demócrata el sábado y el vicepresidente el lunes) para cumplir con los protocolos establecidos y hacerse pruebas de coronavirus.

Pence, de hecho, ha dado negativo en todas las pruebas que se ha hecho desde que se anunció el contagio de Trump el pasado viernes de madrugada, lo que ha marcado la agenda informativa en Estados Unidos desde entonces.

Pence invitó al debate a Marsha y Carl Mueller, los padres de Kayla Mueller, quien fue asesinada por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en 2015 durante la Presidencia del demócrata Barack Obama, mientras que Harris a la congresista estatal de Utah Angela Romero y a la profesora Deborah Gatrell.

Este miércoles, la campaña de la senadora demócrata dejó claro que Harris tiene un «difícil» reto por delante puesto que Pence es «formidable a la hora de debatir«.

«Nuestra expectativa es que Mike Pence tendrá un buen debate. Ha tenido éxito en otros debates y tuvo su propio programa de radio, así que no le subestimamos», dijo una asesora de la campaña presidencial de Biden, Symone Sanders, durante una rueda de prensa telefónica horas antes del encuentro.

La campaña de reelección de Trump y la Casa Blanca por su parte han dado pocos detalles sobre la preparación de Pence para el debate, pero la cadena NBC News asegura que el vicepresidente se ha entrenado para rebatir a Harris sin que se perciba como que la está atacando de una forma machista.

Harris es la primera mujer afroamericana y de origen asiático que participa en un debate de candidatos a la Vicepresidencia.