Miles de personas recibieron este martes al clérigo musulmán radical Rizieq Shihab a su llegada a Yakarta en un vuelo desde Arabia Saudí, adonde se exilió en 2017 tras ser acusado de cargos de pornografía que luego fueron retirados.

«Una vez que Alá me ha señalado el camino de retorno a casa, no hay poder que pueda oponerse», dijo el clérigo indonesio, fundador del Frente de Defensores del Islam (FDI), ante una multitud de seguidores en el aeropuerto internacional Soekarno-Hatta en la capital.

«Alahu Akbar» (Dios es grande), coreaban los seguidores de Rizieq, quien afirmó que ha regresado a su país para llevar a cabo una revolución moral en Indonesia, el país con mayor número de musulmanes del mundo.

«Hagamos una revolución, hagamos una revolución ahora mismo. Una revolución moral para salvar a Indonesia», proclamó el clérigo, polémico por su visión fundamentalista del islam y diatribas contra las minorías religiosas.

AGLOMERACIONES A PESAR DE LA COVID-19

La afluencia de sus seguidores, en su mayoría hombres vestidos de blanco, provocó tantas retenciones en la autovía hacia el aeródromo que la aerolínea estatal Garuda ha ofrecido a los pasajeros afectados el reembolso de los billetes o la posibilidad de cambiar las fechas de vuelo sin sobrecoste.

Las autoridades no tomaron medidas para frenar la marcha a pesar de las restricciones por la pandemia de la covid-19, que ha causado más de 444.000 infecciones y 14.000 muertos en el archipiélago.

Rizieq, de 55 años, se marchó a Arabia Saudí en abril de 2017 cuando la Policía indonesia estaba investigando mensajes explícitamente sexuales que el clérigo había intercambiado supuestamente con una seguidora en la red social Whatsapp.

Tras su exilio y al no comparecer ante las autoridades, la Policía presentó cargos formales por vulnerar la ley de pornografía, así como por violar la ideología fundacional del Estado indonesio, Pancasila, que promueve la unidad nacional y el respeto interreligioso.

Sin embargo, los cargos fueron retirados a mediados de 2018, lo que ha permitido el regreso del predicador.

Rizieq, que ha acusado al Gobierno de retrasar su regreso con trabas burocráticas, podrá asistir a la próxima boda de una de sus hijas, anunciada en el canal de Youtube del FDI.

PASADO POLÉMICO

Defensor de la ley islámica («sharía») y contrario a la secularización, Rizieq fue encarcelado durante siete meses en 2003 por alentar a sus seguidores del FDI a atacar locales de ocio nocturno en Yakarta.

En 2008, fue condenado a un año y medio de prisión por incitar a sus simpatizantes a atacar a otro grupo que pedía la libertad de credo en Indonesia.

Rizieq también fue uno de los cabecillas de las protestas de radicales islámicos en 2016 y 2017 contra el entonces gobernador de Yakarta, el cristiano Basuki Tjahaja Purnama, antes de que este fuera condenado a dos años de prisión por blasfemia.