La fiscalía nipona que lleva el caso del incendio provocado que el 18 de julio de 2019 causó 36 muertos decidió hoy que el presunto responsable puede ser juzgado después de completarse los exámenes psicológicos a los que fue sometido.

Shinji Aoba está acusado del incendio en los estudios de la firma Kyoto Animation, en la ciudad de Kioto, donde se presentó y esparció un líquido inflamable que posteriormente prendió fuego, desatando una de las peores tragedias en la historia reciente de Japón.

El presunto responsable, de 42 años, fue examinado por expertos desde junio pasado para confirmar si, teniendo en cuenta su historial sobre problemas mentales previos, podría ser considerado responsable para ser procesado penalmente.

Según informó la cadena pública NHK, la fiscalía que lleva el caso consideró que el detenido era competente y podía ser procesado porque preparó el incendio y, entre otras razones, en los interrogatorios llegó a decir que pretendía «matar a mucha gente».

Al parecer, Shinji Aoba decidió incendiar los estudios de animación porque aseguró que le habían plagiado una de sus obras, algo que Kyoto Animation rechaza.

Además de los 36 muertos, el incendio provocado causó 33 heridos, incluido el supuesto perpetrador, quien tuvo que ser hospitalizado por las quemaduras que sufrió y fue formalmente detenido el pasado 27 de julio, una vez se repuso de sus lesiones.

La mayoría de los fallecidos en el suceso tenían entre 20 y 30 años y quedaron atrapados en una escalera del edificio de tres plantas cuando intentaban escapar de las llamas hacia la azotea.

El día del incendio había en la sede de Kyoto Animation 70 de los más de 170 trabajadores del estudio, conocido tanto en Japón como en el extranjero por producciones como las series «K-ON!!» y «La melancolía de Haruhi Suzumiya«.