Ha pasado menos de un mes desde que Reino Unido se convirtiera en el primer país en empezar la vacunación con la inmunización desarrollada por Pfizer-BioNtech, el pasado 8 de diciembre, y ahora es también el primero que ha comenzado con la de Oxford y AstraZeneca.

Este lunes, el primero en recibir la inyección fue el británico Brian Pinker, de 82 años y paciente de diálisis. Como no podía ser de otra manera, en un acto cargado de simbolismo esta primera vacuna se administró en el Hospital Churchill de Oxford.

Tras vacunarse, manifestó sentirse «muy contento» de ser el primer afortunado, además de estar «realmente orgulloso» de que se haya desarrollado en su ciudad natal.

Pinker, que antes de jubilarse trabajó como gerente de mantenimiento, recibió la inyección de la enfermera Sam Foster. «Las enfermeras, los médicos y el personal han sido brillantes y ahora tengo muchas ganas de celebrar mi 48 aniversario de bodas con mi esposa Shirley a finales de este año», dijo Pinker, mientras que la enfermera declaró que «fue un verdadero privilegio poder administrar la primera vacuna de Oxford en el hospital Churchill aquí en Oxford, a solo unos cientos de metros de donde se desarrolló».

Esta es la primera de las 530.000 dosis que ya están listas para ser utilizadas y que se administrarán en Oxford, Londres, Sussex, Lancashire y Warwickshire. El ministro de Sanidad, Matt Hancock, se felicitó por el logro, al que calificó como un «momento crucial» en la lucha de la nación contra el virus y su departamento detalló que conforme vayan llegando nuevas dosis, serán trasladadas a residencias de ancianos y centros de salud más pequeños, mientras que la de Pfizer, más difícil de transportar por la necesidad de estar a 70 grados bajo cero, previsiblemente seguirá administrándose en los hospitales. «Van a ser unas semanas difíciles, pero esta es la salida», aseveró. También estuvo entre los primeros vacunados el profesor de música y padre de tres hijos Trevor Cowlett, de 88 años.