El gobierno mexicano desplegó a 500 elementos del Instituto Nacional de Migración (Inami), Guardia Nacional (GN), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y personal de Protección Civil en las márgenes del Río Suchiate, ante la amenaza de la llegada de una nueva caravana de migrantes procedente de Honduras.

Desde la noche del miércoles unos 250 migrantes partieron de San Pedro Sula hacia la frontera con territorio guatemalteco, para después caminar hacia México y posteriormente a Estados Unidos.

El gobierno mexicano resguarda su frontera con Guatemala en los puntos conocidos como el Coyote y el Limón, además de otros puntos ciegos y ha empezado exigir documentos oficiales a toda persona que ingresan en balsas procedentes de Guatemala.

Usarios de redes sociales criticaron lo que el Inami llamó el despliegue de «rescate humanitario», mostrando fotografías de la gran cantidad de elementos, lo que valió comparaciones con la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.