La Cámara de Diputados aprobó en lo general con 304 votos a favor, 179, en contra y 4 abstenciones, el proyecto de decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica, enviada por el presidente Andrés López al Congreso de la Unión.

El presidente de la Comisión de Energía, Manuel Rodríguez González, aseguró que con la reforma se plantea el rescate y el fortalecimiento de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), garantizando la confiabilidad y seguridad del sistema eléctrico nacional y manteniendo tarifas bajas.

Desde tribuna, el legislador de Partido Morena, negó que los cambios propuestos implican la concesión de un contrato preferencial para la CFE, pues es necesario acabar con las condiciones de inequidad y desigualdad.

Es falso que se pretenda impedir la libre competencia; el objetivo es recuperar la función rectora y de planeación del Estado en un área estratégica, como la eléctrica, para garantizar la seguridad energética y nacional, planteando construir un piso parejo para todas las empresas generadoras y garantizando la libre concurrencia”, dijo.

Afirmó que la iniciativa es «clara y categórica«, detener la «sangría financiera» de la CFE por los subsidios a los generadores privados cuya factura es transferida a los contribuyentes y consumidores finales.

Destacó que se plantea la necesidad de acabar con el «circulo vicioso de inequidad» que le puso la reforma energética a la CFE, al obligarla a competir en el mercado en condiciones «de inequidad y desigualdad«.

Explicó que la gran gama de subsidios de la CFE representa un impacto de 250 mil millones de pesos, que «evidencia un mercado carente de igualdad«, por lo que se propone un despacho con precios «igualitarios«.

En contra del dictamen, el diputado federal del PAN, Hernán Salinas Wolberg, afirmó que la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica es «dañina para la economía y el medio ambiente, asimismo resulta inconstitucional«.

Desde la plataforma digital Zoom, al fijar la postura de su partido durante la discusión del dictamen que reforma y adiciona la citada ley, el legislador señaló que «habrá menos energía, será más cara y contaminante«.

Mencionó que esta iniciativa favorece a las centrales de generación de la CFE, lo que elevará el costo de recurso.

Añadió que es «una contrarreforma que encarecerá la energía» y no contribuirá a obtener energías limpias.

Acusó que la mayoría parlamentaria no realizó ningún cambio a esta iniciativa enviada por el ejecutivo, que tiene «conceptos regresivos» para México.

Del PRI, Enrique Ochoa Reza señaló que se establece en la ley que las centrales de energía van a utilizarse primero, indistintamente de su costo y, por lo tanto, «está poniendo la energía más cara y contaminante«, la que se produce con combustóleo y con diesel a la mitad del sistema.

La despachará antes del despacho de los parques eólicos y solares con los que ya cuenta México y con las que contaría en el futuro”, comentó.

Alertó que «ningún sistema eléctrico en el mundo pone por delante el combustóleo y el diesel» que alternativas más económicas y más amigables con el medio ambiente.

¿Cuál será el resultado de este cambio caprichoso en la ley? Energía eléctrica más cara y más contaminante”, afirmó.

Sostuvo que esta iniciativa preferente, “es impedir la libre competencia en generación, porque establece un orden preestablecido de despacho, lo establece por ley, por lo tanto, esta ley es inconstitucional”.

Esta ley es inconstitucional porque tampoco permite la libre comercialización a la que tienen derecho los habitantes de nuestro país y los inversionistas que en este país creen, precisamente porque así lo establece la Constitución”.

Una vez que se desahoguen las 412 reservas que se registraron por parte de la oposición (PAN, PRI, PRD y MC) se procederá a su votación en lo particular para poderlo enviar al Senado de la República para su análisis y discusión.