La Cámara de Representantes de Estados Unidos suspendió la sesión que tenía prevista para mañana, jueves, después de que las autoridades alertasen de un plan de una milicia para asaltar de nuevo el Congreso.

La Cámara Baja debía debatir mañana un proyecto de reforma de la Policía, pero los demócratas que dominan el hemiciclo adelantaron a este mismo miércoles por la noche esa votación, así como otra sobre el derecho a voto.

Estaba previsto que la Cámara Baja concluyera mañana su trabajo de la semana, por lo que una vez que termine la sesión de hoy los congresistas podrán abandonar Washington rumbo a sus estados.

Los demócratas no han querido poner en riesgo a los legisladores, sus asesores y al personal del Congreso después de la alerta de la Policía del Capitolio sobre un posible nuevo asalto este jueves.

  • En un comunicado, ese cuerpo indicó que había obtenido información de Inteligencia que «muestra un posible complot de una milicia identificada para irrumpir el jueves, 4 de marzo, en el Capitolio».