El piloto mexicano Sergio Checo Pérez declaró este sábado, tras la segunda jornada de los test de pretemporada en Bahrein, que ya puede «sentir el potencial» de su monoplaza Red Bull.

Pérez sustituyó al neerlandés Max Verstappen en el segundo día de pruebas de pretemporada y el mexicano registró 117 vueltas. Se centró en las tandas largas con el compuesto de neumáticos más duro de Pirelli, explica su equipo.

Durante la tarde, Checo se quedó brevemente fuera de juego por un problema con la cubierta del motor izquierdo de su coche, pero después de las reparaciones pronto volvió a la pista.

«Ha sido estupendo hacer un día completo de pruebas con el RB16B y, aunque las condiciones son muy complicadas, hemos trabajado mucho y hay mucho desarrollo por hacer«, afirma Pérez.

«Es estupendo trabajar con el equipo y cada vez me acostumbro más a las cosas, ya puedo sentir el potencial. Mañana tengo la mañana en el coche, así que estoy deseando dar más vueltas«, remarca.

Para el ingeniero jefe en carrera de Red Bull, Guillaume Rocquelin, Sergio Pérez «ha realizado hoy un simulacro de carrera completo, incluyendo las paradas en boxes, lo que ha sido muy útil para él, ya que se integra aún más en el equipo y se pone al día con todos los procedimientos«.

«Tuvimos un par de pequeños problemas, nada importante, que no afectaron a nuestro programa de ingeniería, así que en cierto modo son cosas que quieres descubrir en los entrenamientos«, agrega.

«Aparte de esos problemas, ha sido otro día sólido. Está claro que no hemos perseguido los tiempos por vuelta y que sólo hemos rodado con uno de los compuestos más duros, así que no se pueden sacar conclusiones reales de la hoja de tiempos general. En general, han sido dos buenos días y espero que este domingo cerremos el test con otra jornada productiva«, señala Rocquelin.