Los últimos partidos europeos de la ventana de marzo clasificatorios para el Mundial de Catar 2020 culminaron con la victoria de Francia sobre Bosnia (0-1) con Griezmann al rescate, con el batacazo de Alemania, derrotada 1-2 por Macedonia del Norte, y con la ilusión generada por Joaquín Caparrós, héroe de la intocable Armenia.

También superaron sus compromisos España, que dio un salto adelante con una victoria más convincente sobre Kosovo (3-1), Inglaterra, que ganó con sufrimiento a Polonia (2-1), e Italia, que cumplió con el expediente frente a Letonia (0-2).

Pero, sin duda, de todos los resultados, el más llamativo fue el de Alemania. Joachim Löw cerró su último partido clasificatorio para un Mundial al frente de la «mannschaft» con una derrota. Dijo adiós mal, a la espera de volver a dirigir a Alemania por última vez en la Eurocopa, y con una derrota que deja al cuadro germano en la tercera plaza del grupo J.

Alemania siempre fue a remolque en el marcador. Primero, tras el tanto del incombustible Pandev, y, después, con el de Elmas a cinco minutos del final que anuló el empate desde el punto de penalti de Gündogan. El cuadro germano se marchó del Schauinsland-Reisen-Arena sin puntos y rendido ante una victoria histórica de su rival.

  • No menos histórico es lo que está logrando Joaquín Caparrós en el banquillo de Armenia. Es el sorprendente líder del grupo J, por delante de Macedonia del Norte y de Alemania tras sumar nueve puntos de nueve posibles. Su victoria, 3-2 ante Rumanía, con dos goles en los últimos minutos de Haroyan y Barseghyan, desató la euforia en un partido que sí se celebró con público. Caparrós acabó aplaudido e implicado en la pequeña fiesta que se montó sobre el césped tras el pitido final.