Un gol de Iñaki Williams en el minuto noventa (0-1) congeló las ilusiones sevillistas en su pelea por el título de LaLiga, en un partido en el que tuvo ocasiones para resolverlo pero en el que se topó con el meta Unai Simón y con su propia ansiedad, mientras que el Athletic Club, con esta victoria, aún mantiene opciones de lograr algún puesto europeo.

El Sevilla fue el dominador del partido en sus dos mitades pero no tuvo el acierto para ponerlo de cara ante un Athletic que se defendió muy bien y que se aprovechó de las necesidades del adversario para hundirlo ya sin tiempo para la reacción, con lo que ahora las opciones de escalar puestos de los hispalenses, que visitan en la próxima jornada al Real Madrid, quedan diluidas.

Se presentó el equipo de Julen Lopetegui a este partido después de que en el anterior, con la victoria ante el Granada (2-1), se asegurara matemáticamente la cuarta plaza de la clasificación y repetir una campaña más en la Liga de Campeones, pero ahora con la ilusión de dar guerra al Atlético de Madrid, Real Madrid y Barcelona en la pelea por el título.

Sin presión, pero sí con la ilusión que ha planteado en este nuevo reto, los sevillistas cerraban la trigésima cuarta jornada sabiendo que sus rivales habían ganado y que era necesario sumar un nuevo triunfo para acumular a los cinco seguidos que ya habían firmado y no perder el hilo.

  • Lopetegui, finalmente, mantuvo en el equipo al central francés Jules Koundé pese a que los pasados días no ha trabajado al mismo ritmo que sus compañeros, y repitió en el centro del campo con el croata Iván Rakitic y el argentino Alejandro ‘Papu’ Gómez pero sin Joan Jordán por segunda jornada consecutiva.