A partir de la próxima semana que inicia el 24 de mayo, Guerrero pasará a color verde en el semáforo epidemiológico por covid-19, confirmó este viernes el gobernador Héctor Astudillo Flores.

En conferencia de prensa, el mandatario manifestó que los últimos 14 meses han sido sumamente difíciles para el estado, por todas las implicaciones que tuvo ir a un periodo muy prolongado de confinamiento en el que se paralizaron las actividades productivas más importantes.

No obstante, llamó a la población a no relajar las medidas de prevención para evitar un repunte en el índice de contagios.

Hemos tenido altibajos, por lo menos dos picos nacionales que nos alcanzaron; el primero entre mayo y junio del año pasado, donde alcanzamos a tener de 35 a 36 fallecimientos por día. El segundo se registró en enero y febrero pasado, en el que llegamos a tener hasta 26 fallecimientos por día.

Sí, estamos en semáforo verde, pero ello no representa que la pandemia haya terminado. La pandemia sigue, existe, por eso hay que cuidarse y hay que vacunarse, hay que mantener los cuidados y el riesgo de contagio prevalece”, dijo.

Actualmente, Guerrero registra un promedio de siete fallecimientos por día, por lo que se establece que los indicadores han bajado de manera importante, pues la hospitalización va del 20 al 15 por ciento en las regiones.

Manifestó que, de estar cerca del semáforo rojo, el estado ha tenido un avance importante, lo que se refleja en la declaratoria hecha por el sector salud a nivel nacional.

Astudillo Flores indicó que el semáforo verde permite, entre otras cosas, que se comiencen a realizar los preparativos para regresar a clases, para que niños y adolescentes regresen a las aulas, aunque todavía no se tiene una fecha programada para ello.

Astudillo reiteró que el “semáforo verde no significa que nos vamos todos a la pachanga, todos a las reuniones, todos al trabajo y a caminar sin cubrebocas, tenemos que mantener las medidas de prevención siempre presentes”.