Ayer se llevó a cabo la final de la Liga MX en el Estadio Azteca, donde se enfrentó el Cruz Azul y Santos, por lo que se destinó un operativo de seguridad con mil policías para vigilar el recinto y a sus asistentes.

Esta es la primera final de fútbol con público desde que inició la pandemia, por ello, el operativo de seguridad garantizó la seguridad de los asistentes y participantes, además de evitar la conglomeración de personas y la comisión de hechos delictivos.

Dichas acciones inició a partir de las 16:00 horas, en el que los mil 306 policías apoyados con 56 unidades oficiales, siete camionetas, 11 motocicletas, una grúa, una ambulancia y un helicóptero de los Cóndores, resguardaron el recinto deportivo, a fin de vigilar el arribo y el desfogue de los aficionados y con ello garantizar que la actividad se desarrolle adecuadamente.

Aunado al dispositivo de seguridad, los uniformados también verificaron que los protocolos sanitarios por el virus Covid-19, sean respetados por los más de 20 mil asistentes que prevé acudieron a ver la final del Cruz Azul, ya que debido a la nueva normatividad, sólo se permitió la ocupación del 25% de la capacidad del estadio.