El presidente Andrés López, pidió este lunes a su homólogo estadounidense, Joseph Biden, a tomar una decisión respecto al embargo de más de 60 años de ese país a Cuba, al tiempo que confirmó que su gobierno realizará un envío de medicamentos, alimentos y oxígeno a la isla.

«Pienso que el presidente Biden debe tomar una decisión al respecto. Es un llamado respetuoso, desde ningún punto de vista injerencista, pero hay que separar lo político de lo humanitario, la vida es lo más importante, es lo principal de los derechos humanos«, dijo López en su conferencia de hoy.

Señaló que no es posible que en estos tiempos se quiera castigar a un país independiente con un bloqueo, por lo que pidió al gobierno estadounidense que tome ya una decisión al respecto.

Sugirió que se permita que las familias cubanas puedan recibir remesas de quienes trabajan en Estados Unidos o cualquier otra parte del mundo.

«Podrían hacerse muchas cosas, solo sugiero una, con todo respeto para todas las naciones, que se permita que puedan recibir, las familias de Cuba, remesas de quienes viven y trabajan en Estados Unidos o en cualquier otro país del mundo«, dijo.

Y destacó que México recibe apoyo de los migrantes que mandan 4 mil millones de dólares al mes.

Recordó que la situación de salud que vive actualmente la isla es «difícil y no debería haber bloqueos«.

Aprovechó para decir que su gobierno tomó la decisión por solidaridad, ante la situación de Cuba, de ayudar y ser solidarios.

Recordó que enviará a Cuba dos embarcaciones de la Armada con oxígeno, medicinas y alimentos.

Sobre la propuesta que realizó el fin de semana sobre sustituir a la Organización de Estados Americanos (OEA) y crear algo semejante a Unión Europea en América Latina, el presidente no quiso abundar en dicha sugerencia.

No obstante, dijo que se debe buscar una nueva relación entre todos los países de América y se debe convencer y persuadir a las autoridades de Estados Unidos para que «nos integremos con respeto a la soberanía de cada país«.

Y aseguró que la política que se definió hace 200 años ya no funciona. «No es buena para nadie«, apuntó.

Señaló que ya no deben haber invasiones, anexiones, bloqueos y debe haber cooperación para el desarrollo entre todos los pueblos.