México vivió en 2024 el año más caluroso de su historia, según datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Este fenómeno no solo es preocupante por su intensidad, sino también por su rapidez. El aumento de las temperaturas en el país ha sido más acelerado que en otras partes del mundo, lo que ha generado una creciente preocupación entre los expertos.

En los últimos 15 años, la temperatura mínima diaria, registrada entre las 6 y 7 de la mañana, ha mostrado un aumento constante, lo que indica una tendencia que parece continuar en el futuro. Este incremento se enmarca dentro de un patrón global relacionado con el cambio climático, que está afectando a diversas regiones del planeta.

La situación de México también refleja una violación temporal del umbral de 1.5 °C establecido en el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. En 2023, se observó una anomalía con un valor promedio de 1.55 °C en 104 países, incluyendo México, afectando a miles de millones de personas. La tendencia indica que el calentamiento global podría superar este límite hacia finales de esta década.

Los expertos advierten que la actividad humana está acelerando este proceso. Las emisiones de gases de efecto invernadero continúan aumentando, lo que podría llevar a un incremento de 1.9 °C en la temperatura promedio de México entre 2020 y 2040. Esta situación no solo es una preocupación científica, sino también social, ya que las consecuencias del cambio climático impactan a toda la sociedad.

Es urgente actuar para reducir las emisiones y tomar medidas concretas que frenen este proceso, ya que el futuro de las próximas generaciones depende de la acción inmediata ante la crisis climática.