La polémica al interior del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) ha sido relevante después de que Mario Delgado, coordinador del partido en la Cámara de Diputados, anunciara su candidatura a la dirigencia del partido, así como realizar el proceso a través de una encuesta abierta. Mientras algunos han apoyado su postura, otros han considerado que va en contra de la ley.

Mario Delgado realizó una publicación por medio de su cuenta de Twitter en donde mencionaba que la dirigencia de Morena debía realizarse a partir de un método abierto con la finalidad de que la dirigencia que emanara de este proceso tuviese la capacidad de convocar a la unidad entre sus miembros. Cabe decir que este proceso incluso ha sido respaldado por el presidente López Obrador.

“La dirigencia de Morena tiene que renovarse en un proceso que sea abierto, con una metodología clara y sin manipulación. Es necesario que el dirigente que salga de ese proceso tenga toda la legitimidad para convocar a la unidad de toda la militancia para 2021”, escribió en su cuenta de Twitter el líder de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).

Sin embargo, tras la publicación comenzó la controversia. Bertha Luján, presidenta nacional del Consejo de Morena, acusó de tratar de meter mano en el proceso de renovación de la dirigencia del partido, pues dijo que impulsar el método de encuesta abierta para elegir a los nuevos líderes del partido es una medida que viola los estatutos del partido.

Otros diputados y senadores morenistas exigieron no ejercer presiones en contra del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), organismo que ordenó a ese partido llevar a cabo el relevo de su dirigencia nacional a través de una encuesta abierta.

Por medio de una carta pública, los legisladores morenistas, entre ellos Martí Batres, Jesusa Rodríguez y Citlali Hernández, rechazaron cualquier tipo de presión ilegal en contra del órganos con el fin de que pueda realizar el proceso, mismo que desde se su perspectiva es violatorio de la ley.