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El titular de la Secretaría de Medio Ambiente en Hidalgo, Benjamín Rico Moreno, indicó que dos verificentros en el estado han sido clausurados de manera definitiva por incurrir en ilegalidades, y otros cinco más se encuentran en proceso de suspensión e incluso revocación por irregularidades.
Dijo que Hidalgo está inmerso en la Comisión Ambiental de la Megalópolis y uno de los compromisos del estado, junto con otras cinco entidades, es el cumplimiento estricto de la norma 167, que inicialmente era emergente pero esta vez volvió a aplicarse y se considera que en el segundo semestre de este año ya se va a quedar con algunas modificaciones de manera permanente.
“Los centros de verificación no estaban cumpliendo y los hologramas del estado corrían el peligro de no reconocerlos, por eso es que nos vimos en la necesidad de ser más estrictos con ellos para poder pasar este reconocimiento”.
Mencionó que se tienen 36 verificentros abiertos y 26 siguen clausurados por no cumplir con la norma, “fundamentalmente no están cumpliendo en dos cosas, en la calibración de la prueba del dinamómetro y tenemos que reconocer que estaban trampeando muchas cosas y eso hacía que se presentaran las famosas lecturas planas”.
“No registraban las emisiones que emitían los carros y como desconectaban el sistema, no registraba nada, sólo una línea plana y no regresaba la línea, y pues así pasaban todas las revisiones”.
Señaló que quienes hoy están abusando de estas prácticas, no sólo se les ha clausurado, sino que ya suspendieron dos concesiones, “una es en Pachuca y la otra es en Tulancingo, se les canceló total y absolutamente la concesión por prácticas ilegales, estaban manipulando los equipos que permiten enviar los datos hacia el sistema central, que es el que finalmente autoriza la expedición del holograma y la impresión de todos los datos del automóvil”.
Indicó que están en proceso de posible suspensión o revocación de otras concesiones, siendo dos en Pachuca, una en Tulancingo y una en Tula, por irregularidades o bien por obsolescencia en sus equipos.
Explicó que los verificentros no tienen aparatos nuevos, pero ahora ya los pusieron a trabajar, como deben de trabajar.
Informó que este año vencen absolutamente todas las concesiones de los centros de verificación, y ahora van a ser mucho más estrictos en la norma, y sobre todo en los equipos que están requiriendo para poder cumplir.
El funcionario apuntó que para garantizar que los verificentros no caigan en irregularidades, se tiene un equipo de inspección y vigilancia que permanentemente salen a revisar los centros de verificación.
“En segundo lugar, nuestro sistema, que hoy lo operamos, porque antiguamente lo operaba una empresa que nos daba el servicio, hoy lo operamos directamente desde la secretaría y ahí nos emite señales cuando tenemos ese tipo de prácticas y automáticamente nosotros paramos el sistema para que ya no puedan seguir operando”.
Explicó que en el proceso de la renovación de las concesiones, van a ser muy estrictos en cuanto a los equipos, pues van a pedir que sean equipos nuevos y sobre todo que la gente esté capacitada para operarlos.
Rico consideró que no es motivo de preocupación que estén operando todos los verificentros, porque finalmente la cantidad no es muy representativa para estar a la altura de la demanda de los usuarios, “por ejemplo, Puebla que tiene un parque vehicular parecido al del estado de Hidalgo, con cerca de 900 mil vehículos, tiene sólo 17 centros de verificación, con un cumplimiento por arriba del 55 por ciento; Hidalgo con 62 centros de verificación, verificamos tan solo el 22 por ciento”.
Estimó que por cada 10 vehículos que circulan en las calles, sólo dos están cumpliendo, lo cual motiva la preocupación del gobierno, porque de acuerdo con estudios, no está muy lejano el día en que se tenga que aplicar un programa como el Hoy No Circula en el estado, “no es un programa recaudatorio, tenemos que hacer conciencia que el espíritu de ese programa es abonar al medio ambiente”.
