La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró de manera precautoria dos piezas de taxidermia de un coyote y una aguililla a un establecimiento mercantil del municipio de Omitlán de Juárez, Hidalgo, debido a que los poseedores de los mismos no acreditaron la legal procedencia de los ejemplares disecados.

Los ejemplares incautados son un coyote (Canis Latrans) y una aguililla cola roja (Buteo jamaicensis), esto como resultado de las inspecciones en materia de vida silvestre, donde inspectores federales de la Profepa llevaron a cabo el aseguramiento precautorio de los especímenes disecados.

El aseguramiento precautorio se efectuó tras la revisión en un restaurante de venta de cecina, luego de que el propietario del establecimiento no presentara ninguna documentación para acreditar la legal procedencia de ambos ejemplares conforme a la Ley General de Vida Silvestre.

En este caso, las dos piezas de taxidermia deberían de contar con un cintillo de cobro cinegético en caso de haber sido obtenidos mediante cacería, o en su defecto, contar con un sistema de marcaje y una remisión o factura, en la que se demuestre que los ejemplares provienen de un aprovechamiento sustentable autorizado por la Semarnat.

Ante la falta de comprobación, la Profepa iniciará el procedimiento administrativo correspondiente en contra del propietario del establecimiento ya referido.

La dependencia señaló que la Ley General de Vida Silvestre establece que poseer ejemplares, partes y derivados de vida silvestre sin contar con los medios para demostrar su legal procedencia, constituye una infracción que puede ser sancionada con el equivalente de 50 a 50 mil Unidades de Medida y Actualización.