En Hidalgo, de acuerdo con el reporte de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud federal, ya se tiene el primer caso confirmado de dengue en esta temporada de calor en el estado.

La aparición de este primer caso en Hidalgo aun contrasta con los cuatro casos que se presentaron en 2017, de acuerdo con cifras de la dependencia federal.

El caso se tiene ubicado en el municipio de Huejutla, donde se presentó el primer paciente afectado por dengue.

Hasta el momento, en el país existen 481 casos confirmados de dengue, de acuerdo a la Dirección General de Epidemiología, de los cueles el 94% de los casos confirmados corresponden a los estados de Chiapas, Jalisco, Veracruz, Guerrero y Michoacán.

Al comparar el comportamiento de los casos de dengue con lo ocurrido a la misma fecha del 2017, se observa en este 2018 un decremento del 54.06% de los casos confirmados.

Como en ocurre con varios indicadores de salud, Chiapas presenta un comportamiento negativo, al ser el estado con más incidencia de dengue con 219 casos, es decir, con 6.91 casos por cada 100 mil habitantes.

Las estadísticas nacionales indican que los grupos de edad más afectados por el dengue no grave son los niños entre 5 a 9 años, seguido de los menores entre 10 y 14 años de edad, adolescentes de 15 a 19 años, las personas entre los 30 a 34 años de edad y enseguida, de los menores entre el año y los cuatro años de edad.

El dengue es una enfermedad infecciosa, ocasionada por un virus que es transmitida por mosquitos del tipo Aedes aegypti.

Los síntomas del dengue se parecen a los de una gripe, pero de no cuidarse, en ocasiones evoluciona hasta convertirse en un cuadro potencialmente mortal, llamado dengue grave o dengue hemorrágico.

El dengue es una enfermedad que se presenta más en zonas tropicales, la cual causa un estado de afectación general tan intenso, que hace que se conozca también como trancazo o fiebre rompehuesos.

El paciente con dengue presenta fiebre, dolor de huesos, dolor de cabeza intenso en la frente, dolor de ojos, que se incrementa al moverlos, además de nauseas, erupción en la piel parecida al sarampión, vómito, insomnio, comezón, falta de apetito y dolor abdominal, y en casos graves se presenta hemorragia, convulsiones a causa de la fiebre y deshidratación severa.

El dengue no se transmite de una persona a otra y actualmente no hay vacuna para combatirlo. Es común en regiones tropicales y subtropicales y lugares donde se estanca el agua.

Por ello, entre las medidas de prevención, se recomienda usar ropa que cubra la mayor parte del cuerpo para no exponerse a la picadura de los moscos, utilizar repelente contra mosquitos, así como un pabellón o tela que cubra las camas por completo, e instalar mosquiteros en puertas y ventanas.

Hay que evitar la acumulación de basura, no dejar recipientes donde se acumule agua, lavar constantemente contenedores de agua, así como tinacos y cisternas, utilizar larvicidas en contenedores para eliminar larvas de mosco y usar insecticidas especiales para eliminar el mosco en su fase adulta.

Ante cualquier síntoma como los antes descritos, hay que acudir de inmediato con el médico o acercarse a los centros de salud u unidades de medicina familiar para seguir el tratamiento contra el dengue que indique el doctor.

Además, se recomienda tomar abundantes líquidos, guardar reposo y evitar automedicarse.