Este jueves 15 de noviembre, la Fototeca Nacional de la ciudad de Pachuca, Hidalgo, abre sus puertas a la muestra fotográfica denominada “Mirada en fuga”, obra de Guillermo Kahlo, que se enfoca en la propuesta estética del fotógrafo de origen alemán para capturar la magnitud de la arquitectura mexicana de principios del siglo XX.

Hace 120 años, Carl Wilhelm Kahlo Kauffman, mejor conocido como Guillermo Kahlo, se inició en el registro fotográfico de arquitectura en México, y ahora una veintena de imágenes revelan la pulcritud, limpieza y precisión con que tomaba el interior y los exteriores de emblemáticas construcciones de la Ciudad de México.

La maestra Mayra Mendoza, subdirectora de la Fototeca Nacional y curadora de esta exposición, detalló que hace casi 40 años, el repositorio de Pachuca recibió el que constituye el Fondo Guillermo Kahlo, compuesto por más de cuatro mil piezas, entre negativos y positivos, universo que demuestra las múltiples lecturas que pueden darse sobre el trabajo de este fotógrafo.

Acotó que una parte de ese acervo perteneció probablemente a la Dirección General del Patrimonio Nacional, y la otra fue entregada al Museo Nacional hacia 1909.

Guillermo Kahlo emigró a México a los 19 años y pronto se integró a la vida productiva del país en actividades comerciales e incluso llevó los libros de contabilidad de establecimientos mercantiles propiedad de sus connacionales.

En 1894 se naturalizó mexicano aduciendo los “sentimientos de afecto y adhesión a este país”, además de que un año atrás había contraído “matrimonio con una señorita mexicana”.

Mayra Mendoza explica que tras estrenarse en el registro fotográfico de arquitectura con la serie sobre la Casa Boker en el centro de la Ciudad de México, -fundada por el empresario alemán Roberto Boker como una empresa de compra-venta de productos importados-, Kahlo se anunciaría en 1901 en El Mundo Ilustrado como fotógrafo de edificios, interiores, habitaciones, fábricas, etcétera.

Para 1904 publicó su primera compilación de imágenes en forma de álbum: Mexiko, en alemán y español, de modo que en las primeras dos décadas del siglo XX ya gozaba de gran prestigio no sólo como fotógrafo de arquitectura, sino también como retratista de grupos, una faceta poco citada de obra.

Mirada en fuga es un muestra pequeña, pero representativa, del exhaustivo registro que Kahlo realizó de los monumentos de la capital en las primeras tres décadas del siglo pasado, tanto del patrimonio arquitectónico virreinal, especialmente de corte religioso; como de edificaciones estrenadas en los albores del siglo o de las que se estaban ultimando detalles.

El público podrá admirar la panorámica de un “congestionado” Zócalo capitalino, cuando tranvías y automóviles representaban un signo de modernidad para los años 20; ésta se contrapuntea con los ángulos de la escalera central del Edificio de Correos. Una vista de la villa de Guadalupe o de la portada de la Catedral Metropolitana, emblemas de la arquitectura colonial, contrasta con las fachadas neoclásicas de los edificios “porfiristas” como el de las Líneas Nacionales de México o el Palacio Legislativo de la calle Donceles.

Mayra Mendoza califica la mirada de Kahlo sobre los monumentos y sitios fotografiados como “impecable, acuciosa y precisa, resultado de un meticuloso trabajo que implicaba el análisis del espacio interior y exterior, así como de la luz en las diferentes horas del día para decidir el mejor momento de realizar la toma, con periodos largos de exposición, que hacen imperceptibles a la gente en los diferentes escenarios”.

La subdirectora del Sistema Nacional de Fototecas concluye que Guillermo Kahlo. Padre de la conocida pintora Frida Kahlo, debe ser considerado uno de los más notables fotógrafos de arquitectura de todos los tiempos en México, cuya propuesta estética se alejó del pictorialismo decimonónico.

Mirada en fuga permanecerá hasta el 20 de enero próximo, en la Sala Nacho López de la Fototeca Nacional, ubicada en el Ex Convento de San Francisco en Pachuca, Hidalgo, con entrada libre, de martes a domingo, de 10 a 18 horas.