A las afueras del Congreso del estado de Hidalgo, representantes de un centenar de organizaciones de la sociedad civil, se congregaron para fijar su postura, con relación a una iniciativa de ley que impulsa la legisladora Roxana Montealegre, para el fomento y fortalecimiento de estas organizaciones en el estado de Hidalgo.

Los representantes de estas cien asociaciones, encabezados por Esther Pérez Macías presidenta de la asociación GEMMA y Gerardo Romero García, presidente de la asociación DEFIENDEHH, fueron recibidos precisamente a las afueras del congreso del estado por la diputada Roxana Montealegre, quien los invitó a pasar, pero declinaron e indicaron que eso lo harían en otro momento, porque les interesaba plantear su postura, en una situación que derivó en un ambiente de tensión.

En su postura, indicaron que el gobierno no puede hacer todo solo, sino que necesita de aliados ciudadanos y la construcción de alianzas público-privadas, “las organizaciones ayudamos a que las políticas sean públicas y no se queden solo como políticas gubernamentales”.

Consideraron que se necesitan organizaciones que denuncien la corrupción, que fomenten la transparencia y fomenten los derechos humanos, protejan a los animales y al medio ambiente, o que atiendan a poblaciones vulnerables, entre otras acciones.

De tal suerte, que estas organizaciones levantaban la voz, para hacer del conocimiento público, que rechazaban la forma en cómo la diputada Roxana Montealegre pretende legislar.

Recordaron que el pasado 13 de noviembre de 2018 la legisladora presentó una iniciativa para conformar la Ley de Fomento y Fortalecimiento de las actividades de las Organizaciones de la Sociedad Civil del Estado de Hidalgo, iniciativa que se presentó sin la consulta a las organizaciones de la sociedad civil de Hidalgo, sin aperturar mecanismos de participación y sin diálogo alguno, acusando que leyó como propio, un documento que estas organizaciones crearon como presunto borrador en el año 2016.

Señalaron que la congresista mostraba desconocimiento sobre el sector que pretende abanderar, pues es una causa por la que han luchado muchos hombres y mujeres durante muchos años. Expusieron que cuando presentó esta iniciativa, muchas organizaciones se mostraron sorprendidas y molestas, argumentando en redes sociales que no se había realizado una consulta.

Consideraron que muestra un protagonismo que ofende al tercer sector, e indicaron que fueron convocados a foros de consulta el día 7 de febrero de 2019 en las instalaciones del Congreso del Estado, los cuales se desarrollaron en mesas, divididas en desarrollo cultural, desarrollo social, urbanismo y medio ambiente, derechos humanos y salud, pero consideraron que se hizo con una metodología poco clara de desarrollo, siendo más bien mesas improvisadas y dejando la percepción de ser un ejercicio de simulación, “no se habló del contenido de la ley ni se hicieron propuestas al articulado”.

Estimaron que no se les ha sabido escuchar, porque citaron que fueron tratados de forma despectiva o cortante a quienes objetaban o decían cosas incomodas en este foro, donde se pretende impulsar una iniciativa que a juicio de los inconformes, es pirata.

Como el 13 de febrero estaba previsto la lectura de conclusiones ante la diputada federal, Tatiana Clouthier, indicaron que se hacía este pronunciamiento, porque consideran que la legisladora federal desconoce que la legisladora local presenta un copy-paste mal hecho (sic), señalando que le van a pasar información que no está completa.

Rechazaron que se apruebe una ley controladora o fiscalizadora, pues quieren una ley de las organizaciones civiles que sea vigente a las necesidades y exigencias del sector, que promueva la participación social, con mayores estímulos, mecanismos de incidencia, mayor profesionalización, sí con regulación, pero no con una ley sancionadora.

La principal deficiencia que tiene el proyecto es que existe un desconocimiento de lo que es el tercer sector, independientemente de que no se nos tomó en cuanta como participantes para que este proyecto fuera presentado como iniciativa, este proyecto busca el control y fiscalización de las organizaciones”, aseguraron, al señalar que aunque si requieren control y transparencia, mayormente piden fomento, pues esta ley como se encuentra no incentiva su actividad y lo que quieren es respaldo.

Señalaron que la diputada se apropió de un borrador, al cual ellos han ido sumando más propuestas y se ha mejorado y adecuado a las organizaciones del estado.

Precisamente leída esta postura ante su presencia, la diputada Roxana Montealegre celebró que se dieran estas críticas, porque antes de que se pasara al proceso legislativo, esta iniciativa tiene que pasar a las comisiones, donde se nutre antes de llegar al pleno para aprobarse o desaprobarse.

La congresista dijo que pidió que esta iniciativa la conocieran las organizaciones, para que la criticaran, la pulieran, la modificaran, y regresara el documento con las actualizaciones que Hidalgo necesita, “celebró que se esté haciendo, cada quien tiene su estilo, hay más de 800 asociaciones en Hidalgo, ellos dicen que hay más de 100 aquí respaldando”.

Aseguró que tienen las listas de asistencia, porque a sus foros sí acudieron 10 veces más de los presentes, por lo que consideró que se está en el camino correcto y que era un estilo de poderlo manifestar.

Montealegre dijo que este documento está armonizado a lo federal y cuando tuvo contacto con las asociaciones, porque la buscaron por tener trabajo previo con ellos, al haber sido impulsora y fundadora de algunas, sobretodo en el tema de urbanismo, “me parece fantástico este ejercicio que estamos haciendo”.