Con el inicio de las lluvias, combinadas con el calor, puede provocar la aparición de enfermedades en esta temporada, como infecciones de vías respiratorias, otitis o inflamación del oído, conjuntivitis, bronquitis, neumonía entre otras, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.

Por eso, en esta temporada es importante extremar precauciones, sobre todo por las mañanas y noches, cuando existe una menor temperatura ambiental derivada de las lluvias.

Entre las medidas preventivas que el Sector Salud recomienda a seguir para prevenir enfermedades, destacan: lavarse las manos antes de cocinar, después de ir al baño, toser o estornudar, posterior al uso del transporte público, tocar dinero, llaves o teléfonos, o bien tras brindar atención a una persona enferma o acariciar una mascota.

Al toser o estornudar se debe de cubrir boca o nariz con un pañuelo desechable o con el ángulo interno del codo, y en caso de haberse mojado, hay que cambiar de inmediato la ropa húmeda.

Por otro lado, especialistas del IMSS refieren que las lluvias originan la proliferación de moscos, que pueden transmitir enfermedades como el dengue, chikungunya y zika.

Así que la recomendación para evitar los moscos es eliminar los estancamientos de agua, desalojando agua de floreros, plantas, botes o llantas en el patio y encharcamientos en los techos.

Además, en las casas se puede formar moho a causa de la humedad, lo que pone en riesgo la salud al debilitar el sistema inmunológico y afectar a personas con bronquitis, quienes pueden mostrar cuadros asmáticos y broncoespasmos, por lo que es necesario eliminar el problema.

Al respecto, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) el doctor Arturo Díaz Hernández, coordinador de Programas Médicos de la División de Medicina Familiar del IMSS recomendó como cuidados generales mantener una constante hidratación, beber un mínimo de dos y hasta tres litros de agua durante todo el día, a fin de prevenir la deshidratación y el golpe de calor; optar por lugares ventilados y usar ropa fresca en el día.

Indicó que ante un posible cambio brusco de temperatura, hay que cargar siempre una chamarra y sombrilla, además de cubrir nariz y boca cuando uno se expone a estos cambios  intempestivos.

Ante las altas temperaturas, recomendó usar bloqueador con factor UV mínimo de 50, el cual se debe aplica por lo menos cada cuatro horas.

Estas medidas preventivas son para toda la población, y de particular importancia para niñas, niños y adultos mayores, pues tienen mayor riesgo de enfermar en esta época de calor y lluvias, además de los pacientes con enfermedades crónicas, como diabetes, o con alteraciones de su estado inmunológico.

Destacó que para cuidar la salud, se debe contar con un esquema de vacunación completo, con mayor importancia la vacuna de influenza en el caso de los menores de edad y la antineumocócica para adultos mayores, que previene de males como neumonía y meningitis, así como la vacuna contra rotavirus que protege de enfermedad diarreica grave.

Díaz Hernández apuntó que ante síntomas como flujo nasal, fiebre, tos, dolor de garganta, de cabeza o muscular, fatiga, nariz tapada, sangrado nasal, irritación de ojos, dificultad respiratoria, palpitaciones, sudoración excesiva o pérdida de la conciencia, la población no debe automedicarse, particularmente con antibióticos, pues aunque por ley no está permitido comprarlos sin receta médica.

Sin embargo, hay personas que los adquieren y se los toman de forma indiscriminada, lo que puede provocar que los gérmenes sean más resistentes a los medicamentos.

En el caso de otras medicinas que se usan para aliviar el dolor, la temperatura o la inflamación, advirtió que pueden agravar la enfermedad base, produciendo problemas hepáticos o sangrado del tubo digestivo, sin dejar pasar por alto las reacciones alérgicas que pueden ser letales o que enmascaran cuadros médicos que pueden requerir atención quirúrgica.

Por ello, invitó a los derechohabientes a los módulos PrevenIMSS que hay en todas las Unidades de Medicina Familiar, donde el personal de enfermería les brindará diversas recomendaciones y acciones para cuidar su salud de manera integral, lo que a la vez permite reducir la carga que existe en los consultorios de medicina familiar, donde se brinda atención curativa, para fomentar la educación en salud en materia preventiva.