El gobierno del estado de Hidalgo realizó un recuento de acciones y seguimiento tras la explosión registrada en el municipio de Tlahuelilpan, que el próximo sábado cumplirá un año de haberse registrado, convirtiéndose en la peor tragedia en los 151 años de historia de la entidad.

El saldo final de la tragedia, de acuerdo con este recuento, es de 137 personas que perdieron la vida, 69 en el sitio de la explosión en el terreno del ejido de San Primitivo, más los 68 que fueron falleciendo en hospitales. Solo 13 personas lograron sobrevivir y recibir su alta médica tras estar hospitalizados.

De las víctimas mortales, 127 eran varones y 10 de las fallecidas eran mujeres, del total de defunciones, 9 correspondieron a menores de edad, todos ellos varones.

Fueron 69 restos de personas que murieron en el lugar donde estaba la toma, los cuales han sido identificados y entregados a sus familiares. Para la identificación de los restos, se tomaron 154 muestras genéticas a los familiares de las víctimas.

En total, fueron 194 pequeños, entre niñas y niños, quienes quedaron en orfandad por alguno de los padres, principalmente el papá al ser la mayoría de las víctimas varones.

En esa condición, del total de menores, quedaron huérfanos de padre 175 infantes: 69 niñas, 70 niños y 36 adolescentes.

En tanto que quienes perdieron a su mamá fueron 16 menores: 3 niñas, 9 niños y 4 adolescentes.

También se brindó representación jurídica para tramitar 4 juicios de custodia de 9 niños y niñas quienes quedaron bajo el cuidado de sus tías, tíos y abuelas.

La Secretaría de Salud federal y la de Hidalgo intervinieron en esta emergencia, donde 81 personas fueron hospitalizadas luego de la explosión, las cuales fueron atendidas en 21 hospitales del Centro del país, de los cuales 7 son hospitales de Hidalgo, 14 en Ciudad de México y Estado de México, así como un hospital en EU, en Galvestón, Texas.

Como ya se mencionó, de los 81 hospitalizados, desafortunadamente la mayoría falleció debido a las graves quemaduras que sufrieron, siendo 68 quienes perdieron la vida internados y sólo 13 lograron salir adelante y recobrar en parte la salud.

Luego de la explosión, las instituciones de seguridad pública y protección civil que se coordinaron para atender la tragedia fueron la Procuraduría de Hidalgo y Servicios Periciales, Secretaría de Seguridad Pública, Secretaría de Gobierno con Protección Civil, Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Centro Nacional de Inteligencia y los servicios de emergencia y protección civil de los municipios aledaños a Tlahuelilpan.

Hubo acompañamiento institucional para el traslado de los restos mortales, y aseguramiento de la zona a través de la Dirección de Emergencias.

Se realizó un puente aéreo para resguardar la zona y trasladar a los heridos vía aérea a los hospitales en Ciudad de México.

En las labores de comando se coordinó una fuerza en equipo de 10 motobombas, 20 autotanques de abastecimientos y un equipo de trabajo de 80 bomberos que sofocaron el fuego.

Luego de la deflagración, se entregaron 200 colchonetas para uso de la población evacuada durante el siniestro así como suministro de equipo forense para el levantamiento de los restos.

Tras la tragedia, se realizaron 885 acciones de prevención y combate al delito, 26 acciones de acercamiento social, cursos de sensibilización, platica policial, y se gestionó una patrulla para la zona.

Por este suceso, se abrieron 74 carpetas de investigación, relacionadas por lesiones por lo que resulte de la muerte o presunta desaparición de las personas encontradas sin vida en el lugar, antes de que fueran identificados los restos mediante pruebas periciales.

Se apoyó legalmente con 285 acciones, para dar certidumbre a las familias, con trámites de actas de nacimiento que realizó el DIF Hidalgo.

En cuanto a becas a los pequeños que resultaron afectados de forma indirecta por la tragedia, se han otorgado 108 becas, 21 en preescolar, 66 en primaria y 21 en secundaria, con ayuda de 300 pesos mensuales por los 10 meses que dura el ciclo escolar, que se renueva automáticamente al inscribirse al ciclo escolar siguiente, a estudiantes de Tlahuelilpan, Ajacuba, Tula, Tezontepec de Aldama, Atitalaquia, Tizayuca y Tulancingo.

Sedeso, DIF Hidalgo y la Fundación Michou y Mau intervinieron en el trabajo social, con 2 mil 925 apoyos asistenciales inmediatos, que consistieron en 71 apoyos de orientación por personas desaparecidas, 465 traslados de familiares que buscaban en hospitales a sus familiares.

Se proporcionaron 357 atenciones psicológicas a niñas, niños, adolescentes en orfandad así como a sus redes familiares, se brindaron 269 apoyos en orientación psicológica y de tanatología, apoyo a 549 alumnos, docentes y directivos por parte de la SEPH y se dieron 658 atenciones y contención psicológica derivando en 30 expedientes que se turnaron para su seguimiento en Tlahuelilpan, Tlaxcoapan, Mixquiahuala, Tezontepec de Aldama y Tetepango a través del DIF Hidalgo.

Se repartieron 566 dotaciones alimentarias a 144 personas a través del DIF estatal, que también apoyó 93 servicios funerarios, de 86 hombres y 7 mujeres.

Se apoyó a 6 viviendas con cuartos adicionales y estufas ecológicas, se equipó el PAMAR ubicado a 10 minutos de San Primitivo, y la Fundación Michou y Mau donó equipo especializado al CRIH de Tula, para brindar terapias y capacitación a fisioterapeutas.

En cuanto al apoyo productivo, se entregaron 10 servicios en Tlaxcoapan y 1 en Tlahuelilpan del programa “Pon tu negocio, yo te apoyo” y 6 en Tlahuelilpan del programa Mi primer Empleo.

Ante la contingencia, el personal desplegado para apoyar a las víctimas y familiares fue de 150 personas de la Secretaría de Salud, entre médicos, enfermeras, choferes; Sedeso desplegó a 100 personas entre psicólogos, tanatólogos, funcionarios, mientras el DIF Hidalgo se volcó con 139 elementos de ayuda como psicólogos, trabajadores sociales, abogados, médicos, personal operativo y personal de su funeraria.

La Procuraduría participó con 181 personas para prestar servicio en la emergencia, con 41 agentes del MP, 60 peritos, 80 agentes de investigación y 40 administrativos.

Participaron de la emergencia los hospitales  del ISSSTE en Pachuca, General de Tula, General de Tula Pemex, General de Pachuca, Hospital del IMSS 5 en Tula, ISSSTE Ixmiquilpan, Regional del Valle del Mezquital, Cinta Larga, esto en el estado de Hidalgo.

Apoyaron hospitales de IMSS en Magdalena de las Salinas, Ciudad de México y Traumatología de Lomas Verdes, en Estado de México, Hospital Central Militar, Hospital Central Norte, Hospital Primero de Octubre, Hospital Pediátrico de Tacubaya, Hospital central Sur de Alta Especialidad, Hospital Adolfo López Mateos, Hospital General de Ecatepec Las Américas, Hospital Regional de Alta especialidad de Zumpango, Hospital Bicentenario de la Independencia, Centro Médico Nacional 20 de Noviembre y desde luego, el Hospital Shriners, en Galvestón, Estados Unidos.