Propuesta encabezada por la diputada Lorena Villavicencio y Porfirio Muñoz Ledo en el grupo de diputados de MORENA a partir del día 3 de agosto de 2020. Tiene como finalidad crear discusiones amplias sobre los recortes presupuestales y su transparencia en materia de asuntos de la sociedad civil y rubros específicos en vulnerabilidad como lo son las mujeres e infancias, entre muchos otros.
También acabar con los movimientos en bloque en el congreso que no permiten disentir de la iniciativa del Ejecutivo emulando prácticas del pasado de dictadura de partido.
Villavicencio, que se pronuncia hacia una agenda feminista, cuestiona de entrada el recorte de 151 millones a la atención de mujeres en situaciones de violencia y victimización. Pedirá cuentas claras mediante la Ley de Transparencia y el ejercicio de ese presupuesto etiquetado para su fin original permitiendo a las organizaciones de la sociedad civil que puedan reactivar sus objetos sociales a la brevedad.
Resulta refrescante que dentro del congreso en voces de sus representantes se escuchen voces capaces de disentir con el Ejecutivo y su Partido.
Viene mucho al caso que grupos como estos estén dispuestos a rectificar el actuar de los últimos 20 meses del actuar del gobierno en curso como una manera de resistir el embate de la próxima elección del 2021 donde se perfila una fuerte votación en contra de la mayoría morenista sin importar los contrincantes ni qué intereses representen. Un voto masivo en contra completamente ciego a lo que pueda traer consigo con el único fin de demostrar un descontento que se ha hecho palpable en muchos sectores sociales y que grupos contrarios pueden usar a su favor en muchos sentidos sin que eso represente realmente los mejores intereses de la ciudadanía.
La paradoja resulta en que muchos de los grupos que buscan quitar el voto a MORENA son grupos antiderechos que realmente tienen su tarea resuelta ya que en 20 meses de un sexenio supuestamente proderechos no se ha logrado garantizar y asegurar los derechos fundamentales por los que se pronunciaron durante sus campañas. Lo que se vendió como un gabinete cimentado en mujeres se ha convertido en la Presidencia que ha hecho de las luchas de las mujeres su oposición. Lo mismo con organizaciones campesinas, grupos originarios y sindicatos.
Declarar el final de la Guerra Contra el Narco no ha resultado en una baja de mortandad ni de crimen organizado. La promesa de un sistema de salud para todos está lejos de cumplirse y la emergencia sanitaria se ha salido de control dando pie a politizarla a tal grado que la curva de contagios no baja sino que sube.
En un país de 120 millones sólo una 4a parte recibe apoyos estatales cuando se prometió apoyo en todos los sectores. De los más de 20 millones de adultos mayores que tenemos apenas 8 millones reciben pensiones y eso es con atrasos administrativos y haciendo que se desplacen en una emergencia sanitaria donde son un grupo de alto riesgo para cobrarlas.
Son muchas las fallas y poco lo avanzado pero no podemos dejar de ver que el revés de la pandemia es global y ha tenido muchísimo qué ver con el poco avance de la actual administración y que ha hecho recortes presupuestales obligatorios para poder enfrentar gastos que no estaban contemplados en el ejercicio del 2020.
Les deseamos que la interlocución del espacio que se abre sea útil y fructífera en todos sentidos.
Fabiola Díaz de León
