Amanecemos con el espanto en  la punta de la nariz, en las yemas de los dedos, en la suela de los zapatos, en el roce de brazos con otro transeúnte, en el estornudo y en la tos; mientras otras personas en este mismo país despiertan con los ojos pelones por la amenaza del crimen, por la punzada del hambre en el estómago, por la incertidumbre de no saber cuánto resistirá el empleo esta pandemia y cuándo volverá la “nueva normalidad”.

Por un lado han muerto cerca de 52 mil personas y el doctor López Gatell ya no sabe dónde meterse por tanto señalamiento que se le hace respecto a que no cesa el contagio y no para la muerte; muchas y muchos no ven para cuándo y por eso mejor se salen a la calle con su  tapabocas de trapo a vocear lo que venden, a caminar las calles citadinas a ver si logran unos unos centavos que permitan paliar las ganas de comer y seguir por la vida como los vaqueros de las películas del oeste que saben que una bala les perforara la piel, pero no saben por dónde llegará el tiro del enemigo embozado, aunque en este caso de trata de un virus con corona que invadirá el interior del cuerpo causando un desastre allí adentro.

Muchas personas que conozco permanecen guardadas en sus casas, otras se asoman y de vez en vez se atreven a salir a hacer alguna compra, o acuden al doctor o a comprar alimentos. Algunas se aventuran a caminar por el centro tan lleno casi siempre y otras hasta se van a México o se toman un trago en Los Portales frente a Plaza Juárez.

En tanto, el presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó ayer las  más de 50 mil muertes en nuestro país a causa del Covid-19  y dijo: «nos duelen mucho».

Por eso dijo que el mejor homenaje que se les puede rendir a ellos y a sus deudos es continuar trabajando para hacer realidad el derecho a la salud.

A través de un video, se apreció López Obrador acudió al patio central de Palacio Nacional donde un militar responsable ejecutó el toque de silencio. Después el jefe del Ejecutivo habló de los recursos para paliar la pandemia y dijo que ésta se ha “controlado de manera profesional y gracias a que ya no hay derroche ni lujos en el gobierno se cuentan con recursos suficientes para que nadie se quede sin hospitalización o atención médica”.

Sin embargo hay quienes en el país reclaman vacunas, medicamento para menores con cáncer, entre otros.

Georginaobregon433@gmail.com; T: @Georobregon