Finalmente y pese a las condiciones de salud que han pasado a segundo término por la efervescencia ocasionada por elección de alcaldes en el estado, el fin de semana iniciaron las campañas políticas de las y los candidatos de once partidos políticos, así como aspirantes independientes a los mismos cargos de elección popular lo que representa que habrá en estos tiempos de pandemia, una movilización constante y por toda la entidad de al menos trece mil personas ya que se trata de elegir no solamente a presidentes municipales sino también a síndicos y regidores.

Aunque en realidad la movilidad ya era más que evidente en esta etapa previa a la búsqueda del apoyo ciudadano, ya que para hacerse notar muchos de los partidos y aspirantes se “pintan solos”, porque saben que mientras más mas estén presentes mediática o físicamente la ciudadanía creerá que son los mejores o por lo menos los menos peores para poder ser los gobernantes más cercanos a la población a la que realmente no deben subestimar o creer que aún pueden hacer lo que quieran con ella.

Aun así se ha desatado ya toda una carrera política que en primer lugar hace pensar a más de uno sobre el respeto a la salud y vida que tienen los de la clase política hacia la ciudadanía a la que muchos han comenzado a visitar o llamar para que llegado el momento puedan tener un encuentro presencial para poder convencerlos de que son la mejor de las alternativas para gobernarlos por los siguientes cuatro años que tendrán de duración las nuevas administraciones.

Sin embargo, y totalmente contrario a lo que persiguen los políticos, gran parte de la población no solamente le tiene respeto a la pandemia sino también miedo no solamente a enfermarse sino hasta a perder la vida, por lo que hay quienes hasta se han negado en recibir visitas esporádicas con los candidatos, además de asistir a las constantes conferencias de prensa que con cualquier pretexto convocan diferentes actores pese a saber el riesgo de contagio que se corre.

Pero parece que la pandemia y sus efectos no van a ser obstáculo para muchos de los aspirantes y sus partidos ya que están decididos en salir en busca del apoyo popular para ganar “caiga quien caiga”, uy de esa manera ganar aparentemente un municipio para sus partidos y para sacar adelante a cada una de las demarcaciones, lo cual cada vez es menos creíble debido a la forma de gobernar de algunos alcaldes, muchos de los cuales en estos momentos no solamente dejan muchas dudas sino también muchas deudas por la manera en que van a dejar a los municipios que gobernaron, sino hasta muchas.

Aun así, y con el riesgo que conlleva actualmente hay casos de ex alcaldes que se han registrado para ña contienda actual además de que ya gobernaron no una sino hasta dos veces, pero se han postulado hasta para un tercer ejercicio, además de que en las listas se ha detectado también que hay hasta varios integrantes de una sola familia los que están postulados por diferentes partidos, lo que implica que de cualquier manera, el objetivo es que el poder del municipio quede en una familia.

Pese a todo, ya se logró que la elección de alcaldes sea el próximo 18 de octubre, pero la realidad para todos los que aspiran a un cargo en los ayuntamientos, es que es la ciudadanía la que tiene la decisión final en sus manos, y es a la que en estos tiempos de pandemia los candidatos y partidos van a tener que convencer ya no con las mismas falsas promesas o propuestas como se le llama actualmente, sino con trabajo y verdaderos resultados a las demandas ciudadanas, lo cual no les será nada fácil ante las actuales condiciones tanto sanitarias como de credibilidad que en este y en todos los casos, es lo que más ha contado para decidir por el “mejor”, gobernante, en el nivel que se quiera ver o pensar.