Estamos a unos días de que se celebre el proceso electoral más fuera de lo común de los últimos tiempos por la pandemia del Covid-19, donde a pesar de la situación y de la posibilidad de contagios la actividad política fue más fuerte que la contingencia sanitaria, misma que obligó a más de un candidato a no terminar su campaña y obviamente perder la posibilidad de convertirse en una verdadera posibilidad de nuevo gobierno.
En menos de una semana gran parte de la ciudadanía saldrá a las urnas a votar por su nuevo presidente municipal y los integrantes del ayuntamiento, pero también es cierto que otra parte del electorado preferirá quedarse en sus hogares por temor a resultar contagiados pero en algunos casos por no haber sido convencido por los aspirantes como para tener que arriesgarse a salir a emitir su voto sin tener un verdadero motivo o aspirante que le haya convencido.
Sin embargo, esta elección será un referente no solamente porque se realizan en medio de una pandemia, sino también por la manera en que se desarrollaron todas y cada una de sus etapas las cuales estuvieron suspendidas por varis meses hasta que finalmente se decidió que se tenía que seguir adelante con todas las medidas sanitarias para evitar un mayor número de contagios, además de que esta situación se dijo debía ser también un referente para que en los nuevos tiempos se pueda saber cómo actuar en caso de nuevas contingencias en las que la población, pero principalmente el electorado se encuentre en riesgo.
Lo cierto es que en estos momentos ya estamos en uno de los laboratorios políticos sin antecedente en la historia moderna, además de que ese va a definir muchas cosas más respecto a lo que en la materia se avecina en el próximo año en que tendrá lugar la más grande elección de la historia del país y de la que en el caso de Hidalgo serán electos los diputados locales y federales.
Sí bien se ha dicho también, que en el estado se hacen todas las pruebas para saber qué hacer para que situaciones de emergencia no interfieran en los procesos electorales, lo cierto es que de acuerdo con las autoridades sanitarias, en el actual proceso se presentó un incremento en los casos de contagio por lo que incluso se advirtió a los partidos y candidatos que reforzaran las medidas preventivas para evitar más contagios y no dejar un mal antecedente de que las medidas adoptadas para este tipo de situaciones no funcionan de acuerdo a lo que se pensaba.
Aun así, llegó la hora de la verdad en la que la gran mayoría de partidos y candidatos se van a quedar sin nada debido a que de los más de trece mil aspirantes a las alcaldías y formar parte de los ayuntamientos, menos de la cuarta parte de estos logrará sus objetivos y no será precisamente por su mal trabajo de campaña, sino también por la manera en que algunas autoridades emanadas de sus partidos dejaron los municipios en los cuatro años anteriores en los que obviamente “ayudados” por otras fuerzas policías y autoridades se encargaron de desprestigiarlos.
Pero finalmente el tiempo avanza y se llega la hora en que muchos quisieran que no fuera así, mientras que otros más en ese caso muy pocos tienen confianza en que van a lograr sus metas políticas, pero otros más saben que van a quedar en la antesala de la extinción y que no habrá manera de dar marcha atrás y que en caso de seguir van a tener que hacerlo por otros medios o partidos.
Sin embargo también hay algo muy cierto que esta elección pudo mostrar, y es que a pesar de su experiencia hay muchos partidos que mostraron una total desorganización al momento de conformar sus planillas, porque fie evidente que hubo mucha improvisación y que en realidad muchos de sus abanderados no estaban de todo con ellos.
