Este 2 de noviembre, de acuerdo a la religión católica, se celebra el Día de Todos los Fieles Difuntos, sin embargo, debido al contexto de la actual pandemia por Covid-19, los festejos masivos quedaron suspendidos, así como las visitas a los cementerios fueron prohibidas por las autoridades en materia de salud.
Ante ello, muchas personas decidieron permanecer en sus casas para evitar los riesgos que conlleva contraer el virus, pero otras tantas, optaron por visitar a familiares alrededor de Hidalgo y de otros estados. “El viernes y el sábado pasados, los pasillos y la sala de espera estaban repletos de personas que se iban y llegaban”, relató un trabajador de seguridad de la Central de Autobuses.
Al recorrer los pasillos de la terminal de Pachuca, a la entrada se percibió una fila de personas que se formaban para poder ingresar y adquirir un boleto para viajar, pues antes del mediodía decenas de mujeres y hombres buscaban abordar un autobús que los llevara a su destino.
Con un termómetro, un tapete desinfectante y gel antibacterial a la entrada, el personal de la Central de Autobuses recibe a las y los visitantes, además, de ello, la empleada que toma la temperatura exhorta chicos y grandes a portar de manera adecuada el cubrebocas.
MOVILIDAD EN LA CAPITAL
En el primer cuadro de Pachuca, pasadas las 12 horas, la afluencia de gente en la explanada del Reloj de Pachuca era menor que en días pasados, pues el cambio de clima orilló a las personas a permanecer en sus casas este día de descanso.
Por su parte, las calles que rodean el Centro Histórico de la capital se perciben con menor actividad, pues no todos los negocios y restaurantes estaban abiertos, sin embargo, eran pocas las personas que se sentaban a tomar el sol o a platicar, casi todas permanecieron poco tiempo en la plaza Independencia.
OCUPACIÓN HOTELERA
Derivado de la contingencia sanitaria por el coronavirus, desde meses pasados los hoteles regresaron a operaciones, pero con menor porcentaje de su capacidad total, tal es el caso de una famosa cadena ubicada en el centro de Pachuca, en donde los empleados informaron que sólo se les permite laborar con el 30 por ciento de visitantes.
“Trabajamos al 30 por ciento, pero nuestra ocupación es mucho menor a ese número, sobre todo por las fechas en las que estamos, pues con respecto de las cifras del año pasado, las vistas a nuestro hotel están muy por debajo de lo esperado”, manifestó una empleada del lugar.
