Es lamentable que en estos momentos en que cada vez es mayor el número de contagios y decesos por la enfermedad ocasionada por el virus del Covid-19, aún haya quienes no le tengan miedo, precaución o respeto a los efectos que ha dejado entre los diferentes sectores de la población en la que no respeta clase social, religión o filiación política ya que ha quedad demostrado que el coronavirus no respeta absolutamente a nadie.

Sin embargo en el estado en los últimos días, de acuerdo a lo que se pronosticaba la clase política ha sido seriamente afectada ya que no ha pasado una semana en que no se tenga conocimiento de un contagio e incluso un deceso entre los actores, ya sea militantes, simpatizantes, seguidores, en su momento candidatos, ahora alcaldes electos y hasta dirigentes de partidos, algunos de los cuales tienen mejor suerte que otros en los efectos de la enfermedad.

Pero no se trata de tener o n suerte y de solamente llegar a sentir síntomas leves y salir pronto de la enfermedad o incluso de perder la vida en casos extremos, sino de ser más responsables ante el comportamiento de la pandemia y por la manera en que se han quedado más que demostrados sus efectos, si bien no se trata de tenerle miedo, sí se debe tenerle respeto y mucha precaución.

Sin embargo parece que eso es algo que se encuentra muy lejos de algunos personajes de todos los sectores a los que parece que lo que menos les interesa es contribuir a evitar la expansión de la pandemia, pero eso sí en todo momento y a cada caso cada vez más cercano a todos y ellos mismos ya sea de contagio o de deceso, se rasgan las vestiduras y aunque nadie se los pida hacen pronunciamientos y llamados al respecto para poder cuidarse e implementar todas las medidas sanitarias habidas y por haber.

Lo cierto y ha quedado más que demostrado que mientras haya personas y personajes que sigan actuando de esa manera será cada vez más difícil salir de esta emergencia sanitaria que sí de alguna manera se pensaba que podía ser controlada solamente en una semanas, conforme avanza el tiempo se ve más difícil que la situación sea superada en el corto o mediano plazo.

Pero la realidad es que mientras mantengamos posturas de incongruencia van a continuar los estragos que en cualquier caso será difícil superar dadas las condiciones de que nadie sabe tampoco de qué manera puede afectar porque además de llevar a la muerte quienes han portado el virus según reportes médicos oficiales pueden sufrir secuelas en diferentes órganos lo que a la larga puede llevar incluso a la muerte.

Es entendible también que hay casos en los que sí con lo que sucede difícilmente se tiene para poder sobrevivir, lo es más ante estas circunstancias y es por eso que tampoco se tiene para un cubrebocas todos los días, así como para todos los demás aditamentos como sanitizantes que en realidad también han resultado ser todo un buen negocio para los fabricantes y para aquellos que se dedican a su venta ya que los precios son totalmente elevados y fuera del alcance de muchos sectores de la población principalmente la trabajadora que es mayoría absoluta.

Sin embargo no resta más que esperar a que todos se decidan en actuar como debe ser, pata todos y dejar de ver estas circunstancias como una oportunidad para no perder y sí de ganar, además de dejar de creer que ya le pasó al vecino pero no a mí, ya que solamente basta voltear un poco a los casos graves sucedidos hasta el momento en la clase política donde por privilegiar esa actividad, los estragos han sido totalmente desastrosos desde los líderes, aspirantes a cargos de elección y entre la militancia de los que al final poco se sabe lo que les ha pasado y pasa al respecto.