En el marco del proceso electoral 2020-2021, organización de orientación católica pidió a partidos políticos y candidatos defender sus valores

El Movimiento Social Católico “Viva Cristo Rey” solicitó a los diversos partidos políticos con registro en la entidad, que en el próximo proceso electoral 2020 -2021 seleccionen a representantes que defiendan los valores de las familias hidalguenses.
En conferencia de prensa que se llevó a cabo en el salón Benevento, representantes de dicha agrupación dieron a conocer su inconformidad con los procesos electorales pasados, en los cuales, dijeron, se registró manipulación de votos que los ciudadanos emitieron, así como en los procesos de selección interna de los que emanan personas intereses ajenos a los institutos políticos que los postulan.
El Movimiento Social Católico “Viva Cristo Rey” convocó al pueblo católico de México, así como a las y los ciudadanos que profesan otra religión o ninguna, a salir a votar y evitar el abstencionismo en el siguiente proceso donde se renovarán algunos congresos locales y la Cámara de Diputados, que se llevará a cabo el 6 de junio del próximo año.
Este movimiento surgió el pasado 22 de noviembre del presente año por iniciativa de un grupo de líderes católicos de diferentes regiones del país, preocupados por la problemática que presenta la nación en sus diversos órdenes.
Dicho movimiento social católico retoma en su lema de identificación la frase “Viva Cristo Rey” con la se identificó al movimiento cristero, constituido por un grupo de religiosos católicos que en la década de los 20 del siglo pasado se enfrentó contra el gobierno de Plutarco Elías Calles, en una cruenta guerra que duró tres años.
Ese conflicto estalló tras las reformas de la Constitución de 1917 promulgadas por Calles, en las cuales se modificó el Código Penal para limitar las manifestaciones religiosas, al buscar suprimir la participación de las iglesias en general en la vida pública (en algunos estados se llegaron a establecer leyes que obligaban a que los ministros de culto fueran personas casadas) y se prohibía la existencia de comunidades religiosas, además de limitar el culto religioso únicamente a las iglesias.

Sin embargo, debido a la inevitable herencia del catolicismo por parte del antiguo imperio español, la religión era y sigue siendo parte clave de la identidad social y cultural de los mexicanos, por lo que las diferencias entre ambos bandos no tardaron en desembocar en un conflicto armado.

Damián Vera/ Síntesis