Relatos Covid
Bethel García Vargas
Este viernes 15 de enero en la conferencia de prensa de Salud el doctor Alomía anunció el semáforo epidemiológico que permanecerá vigente durante las próximas dos semanas en el país, informando que entre los 10 estados que regresan a Semáforo Rojo Hidalgo es uno de ellos.
Como ya se podía adelantar desde finales del año pasado, los contagios en el estado han estado al alza de una forma considerable, esto debido a que por las mismas fechas decembrinas las familias y los amigos “más cercanos” se reunieron a convivir sin tener la más mínima medida de protección necesarias para evitar contraer la enfermedad el Covid 19 y todo esto se demostró con la saturación de hospitales en la última semana.
Teniendo un repunte en los contagios en la entidad, el gobierno local implementó las medidas necesarias para intentar disminuir un poco la curva epidémica, pero al parecer a muchos hidalguenses les vale y se enojan aún más con las nuevas restricciones, porque piensan que todo esto es un plan para que los negocios mueran.
De alguna manera y dentro de mi círculo familiar comentábamos que era necesario un cambio de semáforo a rojo, por toda la afluencia de personas que se veía venir para las pasadas fiestas, debido a que teniendo una cercanía con la capital del país, en donde muchos de nuestros paisanos tienen la necesidad de ir a trabajar para poder sostener a su familia, los contagios se han propagado de forma acelerada y realmente ya no se sabe con quién, dónde, qué día fue que se contagiaron, simplemente inician con fiebre, tos, o una “gripa” que no se quita con lo de siempre.
Aunado a esta cercanía, muchas familias visitaron la capital hidalguense para hacer las compras navideñas a las tiendas en donde hubo hasta filas para poder ingresar, tiendas de ropa y jugueterías que estuvieron a tope; posteriormente regresaron a sus municipios a convivir, en donde por desgracia y sin saberlo contagiaron a su familia, vecinos o amigos, porque no se tuvo un cuidado adecuado para evitar infectarse en un lugar en donde la propagación del covid está a la alza.
Tal vez haber reducido nuestra actividad cotidiana al mínimo, solamente salir para lo verdaderamente esencial no seríamos el segundo lugar en ocupación de camas en un hospital, no tendríamos que pelearnos o buscar desesperadamente en la madrugada oxígeno para que sobreviva un día más nuestro familiar.
Como mencionó esta semana nuestro Gobernador Omar Fayad “Qué más hace falta para hacer conciencia social, que las autoridades asumamos la responsabilidad y cerremos todo y declaremos toque de queda? Pues si hay que hacerlo, habremos de hacerlo”. Esto es un llamado más que severo para toda esa población que se niega a quedarse en casa, que anda sin cubrebocas en lugares públicos y a lo mejor siendo asintomáticos contagiado a personas que no conoce pero en su camino se cruza con ellas.
¿Crees que esta última medida, el toque de queda, sea necesario aplicarla en nuestro estado como en otros países para que disminuyan los contagios y sobre todo que ningún hidalguense más falte en cada familia?
Deseo que no lleguemos a tal extremo y por fin entendamos que lo más seguro es que nos quedemos en casa, mantengamos la sana distancia y aunque sea nuestra familia sigamos usando el cubrebocas, porque no sabemos dónde estuvo esa persona ni ella sabe dónde estuvimos nosotros.
