De acuerdo a la actual situación epidemiológica y de georreferencia de las zonas de riesgo por Covid-19 en la Jurisdicción Sanitaria Número 2, Tulancingo y Singuilucan se mantienen en semáforo rojo, mientras que Cuautepec y Santiago Tulantepec se colocan en naranja.
Así lo informó, durante la Sesión Extraordinaria del Comité de Seguridad en Salud, Alejandro Efraín Benítez Herrera, titular de la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), quien recordó que un semáforo naranja no implica la flexibilización de medidas, sino al contrario, incrementar y fomentar aún más la civilidad de la población para la adopción de acciones de autocuidado.
“Entramos a una etapa de habituarnos a esta condición, en la que resulta riesgoso confiarse, pues pese a las cifras diarias de muerte, el adaptarnos nos hace bajar la guardia y por ende un nuevo repunte”, declaró el funcionario estatal.
Señaló que los contagios y muertes en Hidalgo dan muestra de una falla en la aceptación de la población para adoptar las medidas básicas de bioseguridad, lo que sólo ha representado una falta de empatía. “Para el control de esta pandemia, no necesitamos más camas, ni ventiladores o insumos médicos, lo que hace falta es respeto y amor por el prójimo”, mencionó.
Detalló que la entidad aún se encuentra alejada de poder bajar la guardia, por lo que nuevamente llamó a la solidaridad, fuerza, sacrificio y paciencia, como únicos medios para vencer la emergencia sanitaria, pues adelantó, las estadísticas presentadas, obligan a pensar en una o dos semanas más de contención en el estado.
De acuerdo al reporte presentado por parte de la Directora de Políticas y Estrategias de Salud Pública, Concepción Carmona, la región del Valle de Tulancingo aporta 2 mil 185 casos confirmados y 415 defunciones, en donde, el estudio georreferenciado permitió observar el mayor incremento después del mes de noviembre con especial énfasis en grupos de edad económicamente activos y jóvenes que se han convertido en propagadores y que por los actuales ordenamientos, deberían mantenerse en resguardo.
Asimismo, en la reunión se informó que gracias al sistema de georreferencia, hoy se puede determinar la zona con mayor riesgo y de esa manera, hacer una contención localizada de casos; además, fueron presentadas las evaluaciones de las acciones desarrolladas por parte de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COPRISEH) y de Promoción de la Salud, como parte del operativo “Cazadores de Tormentas”.
Finalmente, los alcaldes de los cuatro municipios ya mencionados signaron acuerdos, que contemplan: Establecer como únicos voceros de la pandemia al gobernador y al secretario de salud estatal, reforzar filtros carreteros de los cuatro municipios y la coordinación de protección civil con la finalidad de agilizar traslados de pacientes a través de 911 para no saturar los hospitales del sector, intensificar medidas de protección al interior de los ayuntamientos con filtros sanitarios y en cada área, así como en caso de detectar persona con síntomas no dejarla ingresar.
Al igual, mantener trabajo de cazadores de tormenta en relación a las actividades de movilidad y transporte, acordar con áreas de Copriseh fechas y sitios para trabajos del comité interno de implementación y seguimiento de supervisión de medidas para la nueva normalidad; especificación de establecimientos esenciales y no esenciales para librar dudas sobre reglas de implementación de medidas de sanidad, efectuar reuniones con representantes de funerarias de la zona para dar seguimiento al acuerdo para el manejo adecuado de cadáveres, registro civil y jurisdicción sanitaria; así como, notificar por parte de los ayuntamientos a la Jurisdicción Sanitaria acontecimiento de eventos clandestinos y dar respuesta con Seguridad Pública Estatal.
