Por Rodrigo Peña Duarte
De acuerdo con cifras de 2017 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año mueren en el mundo cerca de 1,3 millones de personas en accidentes de tránsito, y entre 20 y 50 millones padecen traumatismos no mortales causantes de discapacidad. Los accidentes viales, además, constituyen una de las principales causas de mortalidad en todos los grupos etarios, principalmente entre personas de entre 15 y 19 años.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP)01, nuestro país ocupa el séptimo lugar a nivel mundial y el tercero en la región de Latinoamérica en muertes por siniestros viales, con 22 decesos de jóvenes de entre 15 y 29 años al día, y 24 mil decesos en promedio al año. Los siniestros viales constituyen la primera causa de muerte en jóvenes entre 5 y 29 años de edad y la quinta entre la población general.
Un accidente automovilístico podría ocasionar diversas lesiones, ya sean leves, graves o incluso la muerte, dejando a las familias de estos en completa incertidumbre en su futuro financiero y psicológico.
Es cierto que la responsabilidad al conducir recae en la persona que maneja el vehículo, pues este deberá hacerlo de la forma más responsable y cuidadosa, aun así, algunos conductores olvidan estos principios básicos, pero muy importantes al momento de salir y transitar por las calles, carreteras y autopistas.
Desafortunadamente al no comprender y mucho menos visualizar las consecuencias de sus actos, estos podrán tener accidentes graves, en este caso, la muerte, y no queda solo en eso, sino que también pueden ocasionar la muerte a diversas personas que se trasladaban o circulaban por la calle de manera respetuosa y cuidadosa, dejando a familias destrozadas por la pérdida de su ser querido.
Una de los principales factores que fomentan los accidentes automovilísticos, tiene que ver con una conducción a exceso de velocidad, ya que muchas personas no toman o planifican sus tiempos y exceden los límites, mismos que están estipulados a través de señalamientos viales, ante esto es aconsejable circular a una velocidad moderada, respetando todas las señaléticas visibles sobre carretera, puesto que la probabilidad de que una persona sufra lesiones graves durante un accidente de tránsito es menor del 20%, cuando la velocidad del vehículo es de 30 km/h, pero aumenta hasta más del 80% cuando la velocidad excede los 50 km/h.
La conducción “distraída”, es mucho más frecuente en todos los casos de choques y ocurre toda vez que un conductor pierde el enfoque al momento de circular, aunque sea por un momento breve, ya sea al tomar agua, al revisar las notificaciones que recibe el celular, cambiar de estación a la radio o incluso existen casos que, por bostezar, pierden imagen de lo que ocurre al frente o a los lados de su vehículo y ante esto pierden el control.
Estar alerta y disminuir los factores que intervienen y nos distraen, puede salvarnos la vida, a veces el no responder una llamada, el no contestar un mensaje son necesarios para llegar a nuestro destino, sanos y salvos, pero ojo, esto no impedirá que nosotros seamos las víctimas de un conductor más que olvide estas reglas y transite de forma distraída.
Otro de los factores que incide bastante en los accidentes, tiene que ver con el sueño, si, por tan simple que parezca, un conducir cansado es muy peligroso, ya que los conductores con esta condición tienden a desviarse hacia otros carriles y así perder el control de su vehículo, a veces por más prisa que llevemos, detenernos y tomar un pequeño descanso, podrá salvar nuestra vida y las de los demás.
Estoy seguro que tú y la mayoría de las personas hemos visto, presenciado o sufrido algún accidente vehicular, por cualquier situación o factor posible, y fue justo en ese punto cuando entendimos y comenzamos a apreciar más la vida, ayudemos y concienticemos a los demás de la gran responsabilidad que se tiene al momento de conducir cualquier tipo de vehículo automotor, así podremos protegernos a nosotros, a nuestra familia y las demás personas que transitan por las diversas vialidades en todo nuestro país, a veces llegar un poco más tarde, no responder el celular, no mirar notificaciones o contestar, hará que lleguemos a nuestro destino sin un solo rasguño, hará que las carreteras y autopistas sean más seguras para todos nosotros, recuerda también revisar tu vehículo y siempre mantenerlo en óptimas condiciones para reducir el índice de accidentes viales, te pido que no seamos un número más dentro del índice de mortalidad por conducir a exceso de velocidad, conducir de manera somnolienta y descuidada, entro otros factores, vive, pero vive con precaución.
Me despido de ti, esperando que tengas un excelente inicio de semana santa, recuerda que a cualquier lugar que viajes, hazlo con todas las medidas de seguridad posible, para que tú y toda tu familia, sigan conservándose sin ser víctimas de ningún accidente, de igual forma te exhorto a continuar con las medidas de salubridad pertinentes frente a esta pandemia, que aún no culmina.
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