La Comisión Nacional del Agua (Conagua), dio a conocer que en el estado de Hidalgo, 68 municipios presentan algún grado de sequía, de los cuales 44 se encuentran en una condición severa, mientras que 24 en un nivel moderado y 13 tienen un grado anormalmente seco.

Lo anterior, de acuerdo con el Monitor de Sequía en México, emitido por dicho organismo, en donde se precisa que no existe ningún caso de sequía excepcional. Cabe destacar que con dicho número de demarcaciones bajo esa condición, la entidad tiene un 81 por ciento de sequía en todo el territorio.

Ante ello, únicamente el 7.5 por ciento de los municipios de Hidalgo no tienen alguna afectación por la sequía, mientras que en del nivel anormalmente seco existe una afectación del 20.6 por ciento, así como en sequía moderada hay daños por un 25 por ciento en el territorio, siendo la sequía extrema la que ha ocasionado un mayor porcentaje de daños, con 47.3 por ciento, alrededor de todo el estado.

Bajo ese contexto, el estado de Hidalgo se ubica en el lugar número 13 a nivel nacional, de acuerdo al número de municipios que presentan esa condición, según el informe dado a conocer por la Conagua.

En tanto, hasta el pasado 16 de abril, en la entidad existe un 52.8 por ciento en el nivel de las presas, siendo la de Vicente Aguirre, la que tiene el nivel más bajo de su capacidad, con un total de 19.9 por ciento.

Mientras que en la presa de Requena, hay un nivel de 25.9 por ciento. Por encima de esta se encuentran los cuerpos de agua Taxhimay con 47.1 por ciento, Endhó con 49.2 por ciento, así como la de Rojo Gómez con 55.5 por ciento.

En el caso de la presa La Esperanza, esta aguarda el 88.8 por ciento de su capacidad total y la de Zimapán, registra un nivel del 86.2 por ciento, de acuerdo con datos proporcionados por la Comisión Nacional del Agua.

Cabe destacar que debido a dichas condiciones, el organismo federal exhortó a los productores a sembrar en el ciclo otoño-invierno, así como a restringir la siembra de hortalizas, y posponer los segundos cultivos a finales de junio, todo ello a la espera de que la sequía haya disminuido y exista una mayor disponibilidad de agua para la agricultura.