Pasadas las 10 horas, personas que integran el sector salud se congregaron a las afueras del Hospital General de Pachuca para llevar a cabo la manifestación del silencio, con el fin de pedir justicia por el feminicidio de la doctora Beatriz Hernández, al interior de los separos del municipio de Progreso de Obregón.

Alrededor de 200 personas, entre médicas y médicos, enfermeras y enfermeros, así como titulares de las diferentes áreas de la salud, marcharon por diferentes calles céntricas de Pachuca, con el objetivo de pedir a las autoridades que la muerte de la doctora, que es investigada bajo el protocolo de feminicidio, se esclarezca.

En al menos tres ocasiones, el contingente detuvo la marcha, para rendir un homenaje a la galena con un minuto de aplausos. «Ella salvaba vidas y se la quitaron», denunciaron sus compañeros, de la médica que se encontraba en el primer año de la residencia de cirugía general, en el nosocomio de Pachuca.

El grupo de personas, estuvo acompañado de un par de ambulancias, las cuales, encendían de vez en cuando, las torretas, a manera de homenaje hacia la doctora Betty.

Después de varios kilómetros, le grupo arribó a Plaza Juárez, en donde José Antonio Lemus Ogaz, jefe de residentes del Hospital General de Pachuca, pidió a las autoridades esclarecer la muerte de su compañera, quien apenas en el mes de marzo ingresó a dicho nosocomio para realizar su residencia en el área de Cirugía General.

De igual forma, tanto él, como quienes conformaban el contingente, exigieron el cese a la violencia contra su gremio y hacia la población en general.

Los hechos 

El pasado 9 de junio, la doctora tuvo un incidente vial, en el que se bajó de su automóvil para auxiliar. Derivado del incidente, Beatriz fue detenida por elementos de la policía municipal de Progreso de Obregón. 

De acuerdo con testigos del incidente, joven médica no puso resistencia a la detención, y además fue llevada a los separos del mencionado municipio, en donde horas después perdió la vida.

Por el fallecimiento de la doctora, seis policías municipales y la directora de seguridad de Progreso de Obregón fueron detenidos por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) por su presunta relación con el feminicidio de Beatriz. 

Derivado de la muerte de la doctora, el pasado viernes un grupo de manifestantes, incendiaron las instalaciones de la presidencia municipal de Progreso de Obregón, para pedir que el asesinato no quede impune.