Es común que cuando pensamos en el profesional en Trabajo Social se le acuñen labores administrativos y/o de caridad, ya que gracias al origen de la profesión la cual es basada en la ayuda al prójimo y bienestar de las personas se puede malinterpretar.

A través de los años y gracias a diversos autores, la profesión ha crecido en muchos aspectos, las bases son sólidas, sus métodos y metodología permite poder leer las diversas realidades sociales, siendo este un guía para que las personas, grupos o comunidades lleguen a un estado de bienestar acompañados del profesional en Trabajo Social.

Al ser una profesión que tiene contacto directo con problemáticas, demandas intereses y necesidades sociales, sabiendo que la sociedad es sumamente diversa, cambiante, con muchas formas, contextos y perspectivas el Trabajador Social tiene la obligación de estar preparado para lo inesperado, teniendo así una formación bastante completa además de una constante actualización.

Pero ¿Qué tiene que ver todo lo anterior con los Derechos Humanos?

Los Derechos Humanos son mundialmente establecidos, cada país determina como haceros valer, pero para el profesional en Trabajo Social al igual que otras disciplinas, son por así decir el cristal con el cual miran la realidad.

La interpretación de los Derechos Humanos, también juega un papel sumamente importante para la labor del Trabajador Social, al ser el encargado de generar planes en vías de desarrollo, debe tomar en cuenta a cada miembro que involucra la problemática, demanda, interés o necesidad, el contexto, leyes y normas, entre otros.

Las repercusiones que tienen los Derechos Humanos para la profesión son notarios, veámoslo como una cadena de acciones, primero los derechos humanos son mundialmente reconocidos y establecidos, segundo cada país dependiendo su contexto (leyes, normas, etc.) busca la manera de hacerlos valer, tercero las instituciones públicas o privadas son quienes tienen el contacto directo con los miembros de la sociedad y ahí es donde entra el

Trabajador Social que ya sea de manera individual, grupal o comunitaria, busca la dignificación de todos los involucrados, desde una perspectiva de derechos humanos; es importante resaltar que el labor del trabajador social no solo yace en las instituciones.

El Trabajo Social es una disciplina, que debe llevar los Derechos Humanos por delante, dentro de su labor del día a día, sin importar el campo, recursos, modelos que se utilicen, velar por el bienestar de las personas, con principios éticos propios de la profesión, es fundamental para que exista la mejora de la calidad de vida de los individuos.

Es importante tomar en cuenta lo cambiante y multidimensional que puede llegar a ser la sociedad, si bien no existen leyes específicas que permitan leerla, su comportamiento y siguientes pasos, dentro de la profesión existen teorías en las cuales se basan los métodos de acción que propone el trabajador social para la mejora, y regresamos a la importancia de mirar todos desde los derechos humanos.

Es imposible no hablar de Trabajo Social sin involucrar los Derechos Humanos, la relación se vuelve tan estrecha que en el puente de la teoría y la praxis es necesario relacionarlos, los nuevos retos sociales que se enfrentan ambos van encaminados a los obstáculos que impiden el desarrollo, desde algo más local hasta global, sabiendo que los individuos son quienes componen lo colectivo, enfocarse de lo particular a lo generar, o de lo generar de lo particular.

En conclusión, es prioritario que sea cual sea el campo de intervención del Trabajador Social, las labores que ejerza, los métodos, técnicas, teorías, instrumentos que utilice, los Derechos Humanos son de vital importancia para llegar al objetivo de la profesión.