Erika Paola Rosas Bravo
Lamentablemente varios estados y municipios de nuestro país comienzan a padecer seriamente la crisis por el abasto del agua, seguramente en los últimos meses has atravesado por estos estragos e inclusive hay personas que se quejan de esta carencia por meses, semanas o días, inclusive en algunos hogares podemos ver cómo cae de manera intermitente y con poca presión.
Vivimos una escasez de agua impresionante a nivel nacional a consecuencia de la deforestación, calentamiento global, sequías por la disminución de precipitaciones, robo del líquido, mediante tomas clandestinas y evasión del pago, aunado todo esto al uso descontrolado que realizan los ciudadanos día con día tanto en casa como en las grandes fábricas.
Por mencionar un dato, en la Ciudad de México el 40 por ciento del agua potable se desperdicia por fugas: El pasado lunes vimos cómo circuló en varios medios de comunicación la noticia de la mega fuga que se presentó en la alcaldía de Iztapalapa, dejando consigo a 32 colonias sin agua.
Por si se lee estresante aún falta más; ya que tenemos un país donde la población sigue creciendo y muestra de ello es el estado de Nuevo León, particularmente en la zona metropolitana de Monterrey que padece déficit hídrico de 31 millones de metros cúbicos, situación que nunca se había presenciado en la historia.
De acuerdo a la Comisión Nacional de Agua (CONAGUA), los estados que presentan mayor sequía son Chihuahua, Coahuila, Sonora, Baja California y Baja California Sur; además de las entidades del centro del país que atraviesan una situación anormalmente seca y sequía moderada.
La responsabilidad de cuidar este vital líquido y usarlo debidamente es de todos; quienes somos madres de familia podemos inculcarles a nuestras hijas e hijos el valor que tiene el agua, pero esto es solo el principio ya que un día sin agua genera un caos en nuestro quehacer, por eso es momento de hacer algo por el planeta y por el mundo que nuestra niñez vivirá.
Además, los gobiernos federal y estatales deberán desarrollar y mantener la infraestructura hidráulica e incrementar la cobertura de los servicios de agua potable; así como invertir en sistemas de reciclaje o tratamiento de agua.
Por hoy me despido y te invito a cuidar este gran elemento que necesitamos para sobrevivir…
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