Artesanas y artesanos de la comunidad de San Nicolás, cuna de los bordados tenangos, buscan obtener una marca de certificación del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) de sus textiles para protegerlos de los plagios, incluso, se contempla cambiarles el nombre.
Así lo dio a conocer César Aurelio Monroy Vega, director de Fomento Artesanal de la Secretaría de Bienestar e Inclusión Social (Sebiso), quien aseguró que la dependencia y el alcalde de Tenango, Erick Mendoza Hernández, acompañan el proceso.
“Anteriormente se hacían marcas colectivas, un grupo de artesanos generaba una marca, pero en estos momentos estamos trabajando algo que se llama marcas de certificación. Tuvimos una reunión en San Nicolás, la comunidad de los bordados en Tenango, y se está buscando una marca de certificación para mostrar que es un auténtico tenango, que cumpla ciertas características, que sea dibujado y bordado por personas de Tenango de Doria”, indicó.
De acuerdo con el director, el nuevo registro beneficiará los mil 500 artesanos del municipio que bordan dicho textil, pero también se extendería el beneficio a quienes elaboran tenangos y son de la región Otomí-Tepehua, como los municipios de San Bartolo y Huehuetla.
Para concretar el registro de la marca de certificación, la Sebiso debe desarrollar asambleas informativas en el municipio, en las que la población elegirá a un grupo de representantes que tomarán decisiones sobre el tema, todo conforme con la Ley de Patrimonio Cultural Indígena.
Los temas que se están checando, explicó Monroy Vega, es el nombre de los bordados pues aunque mundialmente se conocen como tenangos, la comunidad de San Nicolás señaló que fue un nombre impuesto desde una visión colonizadora; por lo que pidió que se le llame “jätzi ñühu”, que significa bordado en su lengua; asimismo, se discutirá el logotipo que llevaría la marca certificada.
“Se está avanzando y están de acuerdo (las y los artesanos) en la mayoría de los puntos. Si lo hiciéramos como antes, desde el escritorio, ya estaría esa marca presentada. En el 2018 se hizo el cambio en la Ley del IMPI, lo que nos permite usar esa figura de marcas de certificación, que es una buena práctica reconocida por la UNESCO”, concluyó el funcionario estatal.